Los Santos son campeones por sexta vez en su historia

Por Dante Guerra

Tras empatar con los Diablos Rojos, 1-1, en el estadio Nemesio Díez, los Santos se coronaron como campeones del futbol mexicano por sexta vez en su historia. Ello gracias al marcador global de 3-2 a su favor.

Parecía que los Diablos estaban adormecidos, porque Santos empezó el exorcismo de manera cómoda y se puso en ventaja muy pronto.

En el minuto 9, Julio César Furch disparó desde fuera del área. Perecía que el esférico no llevaba potencia, pero sí colocación y efecto suficientes para vencer la estirada del meta Alfredo Talavera. El 1-0 entró pegadito a la base del poste.

El delantero escarlata Fernando Uribe respondió en el minuto 12 con remate de cabeza que merodeó la cabaña del arquero Jonathan Orozco.

Santos rodaba el esférico a su ritmo y buscando aprovechar la velocidad de Djaniny Tavares y Furch al contragolpe. 

Toluca intentaba por las bandas, con Rubens Sambueza cambiando de un lado al otro, pero el argentino no andaba acertado en el pase decisivo ni en la zona prometida. 

Y el Pitu Barrientos no encontraba un socio para tejer jugadas de peligro por el centro del área visitante.

Los Diablos Rojos abusaban de los pelotazos al área y se olvidaron mucho tiempo de los disparos. 

Hasta el 27 se avivó Sambuza en un cobro de tiro libre, al mandar un servicio rasante que Barrientos no alcanzó a empalmar bien y la pelota se paseó dramáticamente cerca de la línea de gol.

Osvaldito Martínez respondió un minuto después con un cañonazo desde afuera del área. Para suerte de Talavera se fue apenas un costado, por centímetros.

En el 34’ Santos estuvo cerca del segundo tanto, pero el capitán Carlos Izquierdoz estrelló su remate de cabeza en el poste, cuando Talavera se había quedado como estatua.

Antes del medio tiempo los pingos se acordaron de los cañones y lanzaron un par de trallazos con etiqueta de gol, sólo que el portero Orozco apagó el fuego con lances espectaculares. Y fue la figura del partido.

Se esperaba que el diablo prendiera la caldera en la segunda parte, pero el partido tardó en elevar la temperatura. Tímidos arribos a la portería santista, sin intensidad.

Hasta el 58 llegó el primer aviso escarlata, cuando Alexis Canelo le pegó de zurda al balón y el arquero Orozco achicó muy bien para rechazar.

Después de eso se diluyó el Toluca. Sambueza le pegó de volea a un balón y en lugar de ir a portería, salió por la banda y cerca del banderín de córner. Tampoco tuvo puntería Gabriel Hauche al 78', al mandar cañonazo arriba del larguero.

Sin embargo, los Diablos despertaron en el 81’, cuando Hauche se reivindicó al llegar a segundo poste para cachetear un balón a botepronto y poner el 1-1 que daba esperanza.

Pero los visitantes defendieron cada balón como si de ello dependiera ser campeón. Y así fue, porque estos Santos alcanzaron el cielo con marcador global de 3-2. Justos monarcas, porque fueron mejores en los dos partidos de la final.