Comerciantes protestan contra el alza del pollo; culpan a distribuidores de la CEDA

En lo que va del año, el costo del pollo se ha incrementado al doble en la Ciudad de México y según los propios comerciantes, el aumento es producto de la especulación que provocan algunos distribuidores en la Central de Abasto (CEDA).

Ayer, por segundo día consecutivo, los vendedores de pollo protestaron para denunciar a los responsables y manifestarse en contra del alza en el precio del producto.

SEÑALAN A DISTRIBUIDORES. Los comerciantes acusan a los más de 200 bodegueros de la Central de Abasto de ser los responsables del aumento. Ellos aseguran que son ellos quienes deciden en cuánto ofrecer el kilo de pollo.

Y aunque los productores de las principales granjas que surten a la Ciudad de México no han subido el precio, los bodegueros se han encargado de aumentarlo.

Así, los comerciantes de mercados han padecido la crisis y el costo que termina pagando el consumidor final en los puestos de mercados, tianguis o pollerías.

Ellos dicen que, de enero a la fecha, han cerrado decenas de locales porque deben dinero de la renta o han tenido que ofrecer otros productos en sus pollerías. Y es que a principios de año el precio por kilo era de 24 pesos. Ayer, el costo fue de 50.

‘CRISIS DE TRUMP’. Según los comerciantes, las granjas que abastecen de pollo a la Ciudad de México están en Guadalajara, Querétaro e Hidalgo, sin embargo los distribuidores de la CEDA, intentan engañarlos y les dicen que el producto viene desde Estados Unidos y que por “la crisis con Trump”, deben aumentar el precio del producto. 

Por ello, los vendedores exigen que se vigile a los bodegueros para impedir que aumenten los precios, con lo que se evitará que muchos negocios quiebren y que el consumidor final no vea afectada su economía.