QUIEREN UNA DINASTÍA
"En Cuba nada va a cambiar": Líder de 'Las Damas de Blanco'
Asegura la líder de ‘Las Damas de Blanco’ que en el país no hay derechos ni libertades y que nada cambiará con Raúl Castro
JOSÉ MELÉNDEZ
En La Habana
La disidente cubana Berta Soler, de 53 años, representante de la organización opositora ‘Las Damas de Blanco’, afirmó ayer a esta casa editorial que con la muerte de Fidel Castro, ‘en Cuba nada va a cambiar’.
‘Las Damas de Blanco’, que acuden todos los domingos desde 2003 a una misa en un templo católico y luego desfilan para exigir la liberación de sus familiares presos por motivos políticos, funcionan en la semitolerancia en un país con un gobierno comunista.
¿Qué cambios pueden ocurrir en Cuba con la muerte del comandante Fidel Castro?
—Para nosotros no es el comandante: es el dictador, el mafioso, el totalitario. Después de su muerte, Cuba va a continuar igual. Hace 10 años, desde 2006 cuando el dictador se enfermó, le entregó el poder a su hermano Raúl. Cuba cada día está peor: sin libertad, sin derechos y esto es lo que ha continuado haciendo Raúl Castro y es lo que hacía su hermano.
¿Cómo impactará la muerte de Fidel Castro en el deshielo Cuba-EU iniciado en diciembre de 2014?
Con la nueva presidencia en EU, con Donald Trump, posiblemente puedan cambiar cosas. Trump está condicionando [el deshielo] con el régimen de los Castro, pero tenemos el derecho de contar con el apoyo internacional y con el de EU.
El presidente de EU, Barack Obama, alega que el embargo económico impuesto a Cuba en 1962 es un fracaso. ¿Está de acuerdo con eliminarlo?
—Para nada. Para levantar el embargo primeramente debe haber cese de la represión, libertad incondicional para todos los presos políticos, elecciones libres y plurales sin coacción, donde podamos los cubanos elegir en las urnas, a través de voto directo, quién es la o el presidente de nuestro país.
El gobierno cubano ha dicho que hay apertura económica pero que jamás habrá reforma o apertura política. ¿Qué opina?
—Lo que hay son reformillas económicas. Vamos a decir que hay reformas económicas cuando los inversionistas extranjeros lleguen a Cuba y contraten a sus trabajadores, les paguen directamente. Mientras el gobierno cubano sea el intermediario, va a ser más de lo mismo. El dinero que tiene que ir a manos de los trabajadores va a manos del régimen, que le da 10% [a los trabajadores] y el resto se lo roba.
¿Cómo describe la situación de los derechos humanos?
—No hay derechos ni libertades. Constantemente están las golpizas, los arrestos, van sobre los hijos, los botan de las escuelas. Son obligados a ir a dar el último adiós al dictador Fidel Castro, porque [de lo contrario hay represalias].
En 2018, finalizará el periodo de gobierno del presidente Castro. ¿Qué prevé de ese cambio?
—Es una falta de respeto de Raúl Castro decir que en 2018 se va del poder y va a nombrar [al vicepresidente Miguel] Díaz-Canel, a su nieto, a su sobrino, a su hijo, al Espíritu Santo… Lo que quiere Raúl Castro es una dinastía.