Construyeron sin hacer caso a advertencias en Santa Fe

Por Joel Ruiz

El estudio de mecánica de suelo que se realizó para la construcción de la zona residencial Vista del Campo, en Santa Fe, donde se presentó el desgajamiento, advertía sobre posibles deslaves y desmoronamiento del talud, a pesar de que la zona se consideraba estable.

También recomendó el reforzamiento de las paredes del talud y diseñar sistemas de drenaje y subdrenaje adecuados, con el objeto de permitir la salida del agua que capten las cañadas bajo los rellenos y a la que llegue a infiltrarse a las zonas críticas, evitando el reblandecimiento.

Estas recomendaciones, principalmente en el reforzamiento de las paredes del talud para evitar los desmoronamientos y deslaves en la zona, no se realizaron, además de que una de las causas del desgajamiento fue el reblandecimiento de la tierra por las fugas en el drenaje.

Los cimientos

Incluso, se presentó una propuesta sobre los taludes y cómo deberían construirse las paredes del reforzamiento. En el caso de la cimentación se propuso que fuera con “zapatas aisladas o corridas ligadas con trabes y apoyadas en las tobas arenosas del terreno”.

El estudio cuenta con apartado especial para los taludes, donde establece que “de acuerdo con las condiciones geológicas observadas, la estabilidad general de los taludes es favorable; sin embargo, la combinación de intemperismo, filtración de agua y sobrecargas en las coronas genera problemas de inestabilidad local”.

Este documento, en poder de esta casa editorial, se elaboró en mayo de 2002 por la empresa TGC Geotecnia a solicitud de la constructora Terrum, encargada de edificar el Residencial Vista del Campo. 

También se hace referencia a la situación de los terrenos de Santa Fe, donde en los últimos 10 años, a partir de la fecha en que se elaboró el dictamen de suelo, se realizaron diversos estudios y exploraciones para evaluar la factibilidad de todo tipo de proyectos, los cuales resultaron positivos para la construcción de inmuebles.

En lo alto

Sobre La Alemana, la zona más elevada del lugar, se concluyó que los taludes eran resistentes y que carecía de fracturas tectónicas.

Pese a la estabilidad del terreno, se recomendó reforzar las paredes del talud lanzando concreto reforzado para evitar el efecto erosivo del agua que ocasiona progresivamente la disminución de su estabilidad; según los recorridos realizados por el lugar, las paredes no presentan concreto para contener la erosión como lo dictó el informe.

Otro caso que llama la atención es que en el año 2000 el uso de suelo establecido para esta zona era habitacional-plurifamiliar, en la que se permitía la construcción de edificios de hasta cinco niveles, misma situación que no fue respetada ya que se contruyeron edificios con más del doble de los pisos propuestos.