Secundaria “sin ley” en Tlalpan

La presunta violación de una menor de 14 años dejó al descubierto la violencia y las  irregularidades con las que conviven maestros y alumnos de la secundaria pública 195 “Tlamachihuapan”, en Tlalpan.

‘Bullying’, instalaciones en mal estado, falta de personal administrativo, deserción de alumnos y profesores e, incluso, amenazas de muerte entre compañeros, es lo que han vivido en los últimos dos ciclos  escolares quienes ahí estudian y trabajan.

Son alumnos de entre 12 y 16 años que cursan su educación media en el plantel ubicado en la calle Tizimín, colonia Jardines del Ajusco, quienes enfrentan a diario esta problemática. 

Hace apenas una semana, durante la ausencia de un profesor, tres alumnos presuntamente agredieron sexualmente a una de sus compañeras durante el turno vespertino. Testigos aseguran que fue la falta de vigilancia lo que les dio oportunidad para encerrarla en un salón y presuntamente abusar de ella.

Pese a que los tres alumnos fueron reportados ante las autoridades de la escuela, se les permitió retirarse a su casa, y no fue hasta que Pamela “N” acudió con su mamá al Ministerio Público de la Coordinación Tlalpan 2, que se inició la averiguación por los delitos de violación y violación equiparada, por lo que los jóvenes fueron detenidos.

Los padres de familias consideran que la situación se agravó durante los últimos cinco meses. Y es que, según mencionaron, la secundaria no cuenta con director en el vespertino, luego de que éste fue echado de la escuela por los propios alumnos.

Ante la exigencia de los padres de que sus hijos tengan mayor seguridad, las autoridades escolares pidieron el apoyo de elementos de la Policía Auxiliar durante el turno de la tarde.  Sin embargo, a pesar de la guardia de poco más de ocho horas que realizan los policías, se han presentado casos de personas ajenas a la escuelas que ingresan para agredir a los alumnos.

“En una ocasión se metió una bandita de la calle, se brincaron la reja y le pegaron a una alumna y a otros dos muchachos. Salieron ensangrentados y nadie hizo nada. Aquí no hay seguridad. Me siento más segura con mi hija en la casa, que dentro de la escuela”, cuenta otra madre de familia, quien asegura que su hija ya no quiere asistir a la escuela, luego de que se diera a conocer el caso de la violación.

Después de que El Gráfico diera a conocer el presunto abuso contra una alumna, autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) visitaron la secundaria y comentaron a los padres de familia que se hará lo posible por atender las irregularidades y asignar a más docentes para completar la plantilla.

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