Calientitos vs cura
Culpan a párroco del 'Cerrillo' de varias irregularidades
Fiesta patronal en el Cerrillo no contaba con permiso para usar pirotecnia
(Foto: Jorge Alvarado | El Gráfico)
Por Michelle García.
Luego de la explosión en la iglesia de la delegación del Cerrillo Vista Hermosa, el alcalde, Fernando Zamora, informó que el ayuntamiento de Toluca no emitió ningún permiso para la quema de juegos pirotécnicos durante las fiestas patronales en la comunidad.
Cabe recordar que el sábado, cinco personas resultaron lesionadas tras el estallido de la pirotecnia almacenada en la torre del templo.
El edil afirmó que este tipo de eventos deben estar autorizados y certificados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y el municipio para realizar un protocolo de seguridad.
“No se comunicaron con nosotros y cometieron otro error, pues pidieron donativos de juegos pirotécnicos a la comunidad, que fueron acumulados en la torre del templo”, dijo.
Detalló que entre los cinco lesionados hay una persona con fracturas, aunque el resto tienen heridas leves fueron atendidas en el lugar, además de que la Dirección de Protección Civil tomo el control de la situación de manera inmediata, haciendo los traslados correspondientes.
Ante las denuncias e investigaciones correspondientes, Zamora Morales, señaló que los responsables, tanto los organizadores como los distribuidores de pirotecnia serán investigados por la Sedena.
Piden retirar al párroco. Habitantes del Cerrillo Vista Hermosa, se manifestaron frente a la Iglesia para solicitar el retiro del párroco, Joel Domínguez, mismo que es acusado del incidente del sábado, considerando su falta de experiencia, aunado a una serie de irregularidades que tienen en descontento a la comunidad, ya que pretende cambiar algunas tradiciones de esta zona.
Los habitantes se concentraron afuera del centro religioso, donde acusaron que Domínguez de imponer precios por misas y eventos, que van desde los 100 y hasta los 2 mil pesos, lo que a decir de los vecinos vulnera la palabra de Dios.
Asimismo, denunciaron que el sacerdote ha rechazado la herencia de mayordomías en el lugar, por lo que nuevas personas participan en la fiesta patronal, dejando de un lado a quienes por costumbre organizaban y dirigían la fiesta patronal.
Durante varias horas, cientos de personas se quedaron afuera de la Iglesia, donde la Dirección de Seguridad Ciudadana neutralizó la protesta, dado que los pobladores culpan de manera directa a los párrocos del siniestro que dejo un saldo de 5 lesionados y la caída de una de las Torres del templo.