Alcaldesa de Cuautitlán Izcalli guarda silencio, tras masacre en Tepojaco

POR SU NOMBRE: Parece que a quien no le tiembla la voz para reconocer que el país enfrenta un grave problema de inseguridad es al senador morenista Higinio Martínez, quien sin dudarlo dijo que lo que se vive en el país es un horror, más allá de los culpables. 

Durante una de sus intervenciones en Comisiones del Senado, Martínez enumeró algunos de los hechos de violencia que se han suscitado desde que la presidenta Claudia Sheinbaum llegó al poder, como la decapitación de quien era alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos o la masacre de una familia de comerciantes en Guerrero o las dos “masacres” o “matanzas”, según sus propis palabras, en Querétaro y el Estado de México.

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CALLADITOS: Por cierto que ayer reinó el silencio en Cuautitlán Izcalli, tras la masacre ocurrida en San Francisco Tepojaco. 

Aunque la presidenta municipal Karla Fiesco festejó el pasado domingo en sus redes sociales el triunfo de Jorge Romero como el virtual presidente nacional del PAN, para la crisis que enfrenta su municipio en materia de seguridad no hubo tiempo de hacer un pronunciamiento.

POR SUS PISTOLAS: La Ciudad de México vivió un fin de semana sangriento. 

Entre el pasado viernes y el domingo, 27 personas fueron agredidas con armas de fuego en diferentes incidentes; 12 de ellos murieron y 15 quedaron lesionados. 

En diferentes momentos de la última década en la capital del país mucho se ha presumido el programa de desarme voluntario; diferentes funcionarios cacareaban de lo exitoso y bien recibido que es. 

La realidad muestra que las calles de la Ciudad de México están inundadas de plomo y que el alcance del programa gubernamental es mínimo.