Dan el último adiós a doctora asesinada en CDMX, médicos exigen dar con el responsable

Médicos especialistas en patología exigieron al gobierno que encuentre al responsable del asesinato de la doctora Alejandra Zarate Osorno, quien fue hallada en la cajuela de su camioneta el viernes por la tarde.

Este domingo, familiares y colegas de la doctora, quien estudió en la Escuela Médico Militar y era teniente coronel en retiro, despidieron a la especialista en el Panteón Francés en una ceremonia privada en la que no se permitió el acceso a personas ajenas.

La doctora, jefa de Patología del Hospital Español, fue hallada sin vida el viernes por la tarde, horas después de que su familia perdiera contacto con ella. 

Videos analizados por la policías muestran que la camioneta Accura de la víctima fue estacionada en Legaria y Calle 1, colonia Pensil, el jueves hacia las once de la noche; un hombre bajó del vehículo y huyó sobre la calle Cacalco con dirección a avenida Legaria, donde se le perdió el rastro.

Mientras la doctora era despedida por sus cercanos, el Colegio y Asociación Mexicana de Patólogos dio a conocer una carta en la que condenan el crimen y piden su solución.

“Como gremio, deseamos expresar públicamente la indignación, dolor, rabia e impotencia ante la gran pérdida que significa la muerte de la doctora Zárate, no sólo para su familia y amigos sino para la sociedad y los pacientes que requirieron de su atención profesional”, señala la carta.

El mensaje añade que desde hace varios años México enfrenta una crisis de seguridad, por lo que no piden que el asesinato de la doctora no sea uno entre muchos.

“Esta frecuencia de sucesos ha originado que, en mayor o menor grado, normalicemos las agresiones por lo que no es posible seguir ignorando esta inseguridad. Los médicos somos el pilar fundamental en la atención a la salud y para los diversos colegios de médicos, asociaciones y federaciones médicas es sumamente preocupante e indignante el incremento de asesinatos de nuestros colegas en diferentes partes del país, la mayoría de ellos impunes”.

La carta finaliza con la exigencia de que se esclarezca el crimen y se brinden las condiciones adecuadas para que los médicos, y toda la sociedad, puedan trabajar con tranquilidad y seguridad.