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"Nos sorprendió encontrar una clara división entre el impacto del chocolate amargo y el chocolate con leche en los riesgos de diabetes y el control de peso a largo plazo", explicó Binkai Liu, estudiante de doctorado y autora principal del estudio.
Los investigadores detectaron que por cada porción adicional de chocolate amargo consumida semanalmente, el riesgo se reduce en 3%. En contraste, el chocolate con leche no mostró beneficios y sí propició aumento de peso.
Los beneficios del chocolate amargo se atribuyen a su alto contenido de cacao y flavonoles, compuestos bioactivos que mejoran la sensibilidad a la insulina y poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Sin embargo, el estudio presenta limitaciones. Al ser observacional, no establece una relación causal directa.
A pesar de los resultados, los expertos no recomiendan aumentar el consumo de chocolate como medida preventiva. Binkai Liu advierte: "El chocolate amargo puede ofrecer beneficios cuando se consume con moderación, pero el consumo excesivo puede llevar a una ingesta calórica excesiva, anulando estos beneficios".
Pero lo que sí recomiendan los especialistas encarados de este escrito es que las personas que consumen chocolate con leche consideren cambiar al chocolate amargo, y recomiendan la fruta como alternativa saludable para satisfacer el antojo de algo dulce.
