FIESTA DE FE
Con semáforo verde en CDMX y ya vacunados, creyentes armarán pachanga para San Judas
(Foto: Especial)
Adriana, junto con muchos peregrinos, preparó el regreso masivo a la iglesia de San Hipólito y aunque no suspendió su visita el año pasado, pese a las restricciones por la emergencia sanitaria, sabe que con el semáforo epidemiológico en verde y la vacunación de la mayoría de los mexicanos la festividad toma un entorno muy parecido al de hace dos años.
“Yo fui y me dio tanta felicidad llegar... aunque estaba abierta la iglesia, no había muchos devotos como en años anteriores, que hay banda y regalan comida. Fui porque es algo muy importante y aunque mucha gente no entiende lo que hacemos, es algo que me llena y me ayuda”.
Con respecto a la cantidad de personas, principalmente jóvenes, que van tomando bebidas alcohólicas o drogándose en su camino para ver al santo, Adriana considera que por una minoría no se puede juzgar a quienes van con devoción a expresar su fe.
“Vas a encontrar borrachos, drogadictos, rateros, pero considero que es gente que no siente el cariño hacia él, que lo hacen por moda o echar cotorreo. Incluso, se habla de las dos historias del San Juditas del bastón de la mano derecha o la izquierda, el bueno o el malo, que no sabemos si es real o no y mucha gente abusa de eso. Pero hay quienes vamos de corazón a agradecerle demasiado y, por desgracia, esa gente nos deja mal”.
Adriana pertenece a un grupo de peregrinos que cada 28 de octubre caminan desde las inmediaciones del metro Guelatao, en Iztapalapa, hasta el cruce del Paseo de la Reforma y avenida Hidalgo, donde se reúnen con otros creyentes para oír misa y, si se puede, pasan a persignarse ante la figura en el altar.
“Este día 28 todo va a estar a reventar, porque hace un año fuimos pocos los que logramos visitarlo en su templo”, concluyó.