SIGUEN LAS RESTRICCIONES
16 de mayo: Valle de México a unas horas de romper su récord de Contingencia Ambiental
Se necesitaron tres días de restricciones para bajar a 114 ppb y así desactivar la contingencia
(Foto: Gabriel Pano)
La contingencia ambiental en la Zona Metropolitana del Valle de México se mantiene. Los niveles de ozono registrados en Atizapán obligan a continuar las restricciones vehiculares que se iniciaron desde el lunes.
Comisión Ambiental de la Megalópolis no adelantó aún que mañana continúe la fase 1, por lo que pide a la población a estar atenta a su comunicado de las 20:00 horas, o antes si las condiciones cambian.
De continuar hasta mañana la aplicación de la fase 1 del plan de contingencia ambiental en el Valle de México, por primera vez en lo que va de este sexenio se alcanzarán cuatro días consecutivos respirando aire de muy mala calidad.
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Desafortunadamente, el reporte de última hora correspondiente a las 15:00 muestra que Atizapán de Zaragoza está por encima de los 150 ppb, por lo que la calidad del aire se considera muy mala. Es decir, la contingencia seguirá en el Valle de México, por lo menos hasta el reporte final del día.
El 22 de febrero pasado se dio el segundo periodo con restricciones ambientales más largo de la administración Sheinbaum-Batres, con tres días consecutivos con muy mala calidad del aire. Se activó la fase I cuando en la estación de la FES Aragón se registraron 187 ppb de ozono, ya muy cerca de los 200 que activarían la segunda fase.
Se necesitaron tres días de restricciones para bajar a 114 ppb y así desactivar la contingencia.
La primera ocasión que ocurrió esta circunstancia de vivir una contingencia durante tres días fue en 2019, al iniciar el 14 de mayo y terminar el 17, aunque con una peculiaridad que no se ha vuelto a ver: se trató de una contingencia ambiental extraordinaria porque los niveles de dos contaminantes estuvieron por encima de los permitidos, tanto el ozono como las partículas suspendidas menores a 2.5 micrómetros que fueron detectados en las estaciones del Pedregal y Nezahualcóyotl.
Esta contingencia de 2019 fue determinante para que las autoridades de la Megalópolis hicieron público, cinco días después de terminada este periodo de alta contaminación, un Nuevo Programa para Prevenir y Responder a Contingencias Ambientales, debido a que la contaminación de esos tres días obligó a aplicar medidas de restricción en las ciudades de Toluca, Querétaro, Puebla, Pachuca y Tlaxcala, además de la capital.
Es en este documento en el que se establece que la Refinería Miguel Hidalgo, de Tula, no operará a más de 76% de su capacidad total, y que el consumo de combustóleo de la Central Termoeléctrica Francisco Pérez Ríos, también en Tula, debe reducirse en 30%.