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Por: JAVIER CABRERA
Foto: (Especiales)
Se estima que el daño a la economía en los tres municipios más afectados, Culiacán, Elota y Navolato, asciende a ocho mil 109 millones de pesos. Tan sólo el sector del comercio organizado en Culiacán, con 20 mil socios, calcula sus pérdidas de venta en 600 millones de pesos.
La industria restaurantera, que en la capital del estado cuenta con 373 socios, reportó que entre los días 9 y 17 de septiembre resintió una caída de casi 80% en los consumos. También se vio obligada a modificar sus horarios.Miguel Taniyama Ceballos, chef de ascendencia japonesa, se dolió de esta situación. Señaló que en su restaurante, que tiene una larga trayectoria en Culiacán, ya tuvieron que eliminar el servicio nocturno por la ausencia de comensales y la seguridad del personal.
“A las siete de la noche, en la capital del estado, casi todas las actividades se mueren. No hay transporte, la gente no sale de sus hogares y se resguarda por temor”, dice.
Reconoce que a un mes del inicio de los enfrentamientos entre las facciones del Cártel de Sinaloa prevalece el miedo y la incertidumbre, pues 27 restaurantes de diversos tipos, muchos de ellos ubicados en zonas muy atractivas, se han visto obligados a cerrar sus puertas, mientras pasa la violencia.
Esto también sucede con los comercios, pues pese a la vigilancia de la Guardia Nacional, muchos bajan la cortina a las seis de la tarde por temor a los asaltos y saqueos. Los pocos que tienen los medios han cerrado sus tiendas físicas y continúan sus ventas en línea.
Hace tres años, Luz María abrió una pequeña estética que se ubica cerca del primer cuadro de Culiacán. Cuenta con empleadas quienes, debido a la violencia, han tenido que quedarse a dormir en el local.
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Foto: (Especiales)
Dice que los clientes dejaron de ir, y ella ya casi agota sus ahorros para mantener el negocio.
Luis Fernando, un arquitecto de 30 años, señala que no tiene más opción que salir de su casa temprano y rezar que nada le suceda. Tiene esposa y un hijo de cinco años, al que decidió no enviar más a la escuela, pues prefiere que pierda el año a que un día algo le pueda suceder.
Mientras tanto, en las escuelas las clases son de forma virtual.
Derivado de las confrontaciones armadas en las dos principales carreteras, la federal 15 y la Maxipista Culiacán-Mazatlán, donde se registran bloqueos con unidades incendiadas, el abasto de alimentos y suministros se empieza a ver afectado.