De leyes a antojitos: Congreso arma extraño debate sobre “La Pancita de la Roma”

ANTOJOS LEGISLATIVOS: El Congreso de la Ciudad de México continúa con el nivel de debate por los suelos. 

En medio de diversos pendientes que tiene la capital del país, ayer la diputada Leonor Gómez Otegui, de Morena, subió un punto de acuerdo para que la alcaldía Cuauhtémoc informe por qué se clausuró temporalmente el establecimiento mercantil “La Pancita de la Roma”; según dijo la congresista, le preocupa mucho la situación que enfrentan los establecimientos mercantiles, aunque solo tenía presente la contingencia de “La Pancita de la Roma” y “otro establecimiento”, por lo que pidió un informe de cuántos locales fueron cerrados en septiembre. 

Más que preocuparle lo que pasa en la alcaldía, pareciera que Gómez Otegui anda de antojo, y extraña los platillos que ahí sirven.

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OLVIDOS: Por cierto que quien ayer hizo que ardiera por momentos la sesión en el Congreso de la Ciudad de México fue la panista América Rangel, fiel a su estilo; y es que en su intervención contra una propuesta de la morenista Cecilia Vadillo Obregón, Rangel la calificó de “espuria” y, además, le dijo “diputada chocolate”; de inmediato, los morenistas se ardieron y llevaron a tribuna el argumento de que el pueblo les dio la mayoría en las urnas, olvidando así que quien les dio la sobrerrepresentación fue el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), gracias al exconsejero Bernardo Valle Monroy, quien les regaló el 12% en la integración del Congreso.

CIFRAS DE MIEDO: Quien ayer se reunió con el Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, fue la gobernadora de Guanajuato, Libia Denidde, para atender la violencia en el estado. 

Y es que no es cosa menor que en los primeros siete días de octubre más de 100 personas hayan sido asesinadas en aquel estado; tan solo el 3 de octubre, mataron a 32 personas, según cifras oficiales.