Antes de pedir doble aguacate, cuida el aguinaldo como un tesoro

Si ya pasaste todo un año dándole duro a la chamba, soportando a Pérez el de contabilidad o lidiando con los patrones, ha llegado la hora de obtener una gratificación que, por ley, les corresponde a todas las personas trabajadoras.

El aguinaldo se debe pagar antes del 20 de diciembre, justo para pagar todos los extras relacionados con las fiestas de fin de año, y se debe entregar el equivalente a 15 días de salario base diario o la cantidad ordinaria que percibes por día laborado.

¿Qué tipo de empleados o trabajadoras deben recibir el pago por esta prestación? Aquellos de base, de confianza, de planta, sindicalizadas, quienes hayan sido contratadas por obra, tiempo determinado, temporada, por tiempo indeterminado sujeto a prueba o sujeto a capacitación inicial, eventuales, comisionistas, agentes de comercio, de seguros, vendedores y otros similares.

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Pero antes de entregar tu aguinaldo a las garras de las supuestas promociones de almacenes, tiendas, bazares y demás destinos impulsivos para el dinero que has chambeado todo un año, analiza estas tres opciones para gastar inteligentemente tu lana.

¿En qué puedes utilizar el aguinaldo para que no se te vaya como agua entre las manos? Los analistas de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) sugieren tres opciones:

1. Pago de deudas. Empieza por las deudas que generan mayores intereses, como los pagos de tarjetas de créditos. Al reducirlas se mejorarás tu salud financiera y vivirás con menos estrés.

2. Recompensa el esfuerzo. Si planeas comprar algún producto o servicio, cuida que sea algo que todos en casa puedan disfrutarlo por el mayor tiempo posible. ¿Qué tal unas clases de natación o una computadora nueva?