Estas son las condiciones laborales de las empleadas domésticas en Toluca

TOLUCA.— Un par de niños llegan a su casa y uno de ellos dice: “Gracias Roge, me arreglaste mi cuarto, me levantaste mis juguetes”. Aunque no son sus hijos Rogelia Sánchez Hernández los atiende como si lo fueran, esta tarea es parte del trabajo doméstico que desempeña.

Las manos de esta mujer originaria de San Andrés Cuexcontitlán, en Toluca, reflejan el paso de los 20 años que se ha dedicado a servir. 

Hoy trabaja con la familia de una mujer que conoció de niña, en la casa de sus padres donde en ese entonces ella laboraba.

Roge, como de cariño le dicen, comenzó a trabajar porque el dinero no alcanzaba para mantener a su familia, menos ahora que tiene a su esposo enfermo y debe llevar el sustento a la casa.

Asegura que no ha sufrido discriminación ni malos tratos por parte de sus patrones, porque ha tenido la fortuna de trabajar con "gente buena", a pesar de eso le gustaría mejorar sus condiciones laborales, pues como muchas otras personas que se dedican al trabajo doméstico, no tiene un contrato, ingreso fijo, seguridad social, aguinaldo, ni vacaciones.

SUBESTIMADO. Itzel Hernández, coordinadora de la especialidad en Género, Violencia y Políticas Públicas de la UAEM, señaló que el trabajo doméstico es un oficio desvalorizado y quienes lo ejercen suelen ser objeto de discriminación y violación a sus derechos laborales.

Refirió que si bien, también hay trabajadores domésticos, son las mujeres quienes generalmente desempeñan este oficio poco regulado, y donde son susceptibles a ser violentadas por su condición de género. 

“Hay infinidad de historias de trabajadoras que fueron hostigadas sexualmente por el hijo, el esposo o el abuelo de la empleadora”, indicó.

INDÍGENAS. Las comunidades indígenas las que más expulsan trabajadoras domésticas en el Edoméx. En el caso de Toluca, la mayoría son de comunidades otomíes como San Cristóbal Huichochitlán, San Andrés Cuexcontitlán, San Pablo Autopan, Tlachaloya y San Mateo Otzacatipan.

AVANCE. La Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenará dar seguro social a las trabajadoras domésticas, lo que empleadas y activistas consideran un gran avance en la lucha por los derechos de las trabajadores domésticas que, según la cifras del INEGI suman más de 2.3 millones en el país.