¡No hay pretextos! Hombre y mujer acordaron vía remota pensión y visita de sus hijas ¿Cómo se dio el hecho?

Javiera y Rubén tuvieron una relación de nueve años durante la que procrearon tres hijas: Sofi, Andy y Lulú; de 8, 6 y 4 años.

Hace dos años decidieron separarse. Rubén se fue a Querétaro para asumir una gerencia, lo que ha impedido ver a sus hijas de manera regular, radicadas en la CDMX.

Era frecuente que las niñas clamaran por la presencia de su papá, por lo que Javiera consideró urgente dar formalidad legal a lo que nunca se lo dieron tras la separación: un régimen de visitas y convivencias, la guarda y custodia, así como la pensión alimenticia.

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Para ello, acudió al Centro de Justicia Alternativa (CJA) del Poder Judicial de la Ciudad de México para obtener certeza jurídica.

Javiera lo planteó a Rubén en una llamada telefónica y le respondió que sería complicado venir a la capital. Ella sabía de la mediación familiar en línea, un servicio que tiene vigente el CJA desde la pandemia; aceptó y generaron una primera sesión a distancia.

Luego de conectarse desde sus respectivos dispositivos y guiados por el mediador familiar, Javiera expresó la necesidad de sus hijas de contar con la presencia de su padre; él reconoció que había restado importancia a esa necesidad, así es que dijo estar dispuesto a que se estableciera en el convenio un régimen de visitas y convivencias una vez por semana, con posibilidad de variar entre sábado y domingo.

Como no había una mala relación ni discrepancias entre Javiera y Rubén, decidieron en la misma sesión formalizar los puntos de la guarda y custodia a favor de ella, así como el monto de la pensión alimenticia para sus hijas, con base en lo que ya les canalizaba vía transferencia. Así terminó el convenio, cuya fuerza legal es la de una sentencia.