Extrañan a Colosio
Magnicidio dejó en el olvido a Lomas Taurinas, Baja California
“Quiero encabezar un gobierno que sea sensible a los reclamos y a las demandas de las comunidades”, dijo Colosio frente a miles aquel 23 de marzo de 1994, un par de horas antes de ser asesinado
(Foto: Omar Martínez, El Gráfico)
Por Gabriela Martínez
LOMAS TAURINAS.— ¿Quién es Luis Donaldo Colosio?, pregunta Luis, de 12 años, que vive a unas calles de donde fue asesinado el excandidato priísta a la presidencia, el 23 de marzo de 1994, una colonia enclavada entre cañones y cerros en Tijuana. “Siempre en estas fechas es cuando todos se acuerdan de nosotros, antes no, nunca”, dice el joven.
“Quiero encabezar un gobierno que sea sensible a los reclamos y a las demandas de las comunidades”, dijo Colosio frente a miles aquel 23 de marzo de 1994, un par de horas antes de ser asesinado.
Para Yolanda, esa promesa del progreso para Lomas Taurinas se murió junto con el candidato. A ese barrio nunca llegó ni la justicia ni la riqueza, al igual que en ese entonces, la violencia y la pobreza siguen presentes, sólo en cada aniversario luctuoso la fachada cambia para el evento simbólico, dice.
“Hace unos meses quisieron matar a una jovencita. La droga corre entre las calles”, lamentó la señora, quien estuvo presente durante el último mitin del priísta. “Con él también se nos fue la esperanza de que Lomas saliera del hoyo”, dice.
