TODOS SON CATRINAS
Miles de Catrinas tapizaron las calles para convertir Reforma en su camino al Mictlán
La CDMX fue testigo de la procesión sin importar el clima, la cantidad de gente o indicaciones de Protección Civil que no se daba abasto por el gran número de asistentes
Por Kevin Ruiz, Eduardo Hernández y Axl Chimal
Reforma se convirtió en el recorrido al Mictlán. Las catrinas marcharon en una procesión que ni la lluvia pudo aminorar su andar. “¡Viva México!”, gritaban los miles de asistentes a la Mega Procesión 2019 que partió del Ángel de la Independencia y, por primera vez, llegó al Zócalo.
Minutos después de las 18:30 horas, los lienzos humanos portaban sombreros charros, vestidos de bodas, bombines y bastones. Las catrinas extendían sus vestidos y bailaron bajo la lluvia. Muchos aseguraron que su participación en la marcha fue para celebrar y recordar a sus muertos; desde el mediodía colmaron las aceras de Reforma para transformarse y estar listos para su andar.
Desde el mediodía mucha gente arribó al lugar, algunos con bancos para hacer menos pesada la espera.
Largas filas
Los maquillistas montaron carpas, las cuales tenían largas filas, pues todos querían ayer ser catrinas. Los precios oscilaron entre 100 y 300 pesos. Esculturas de cráneos coloridos, algunos hechos con tenis, sirvieron para que las personas se retrataran durante todo el recorrido hasta el inframundo.
La CDMX fue testigo de la procesión sin importar el clima, la cantidad de gente o indicaciones de Protección Civil que no se daba abasto por el gran número de asistentes.
Entrada la noche, la procesión se fue rompiendo poco a poco, todo regresando al inframundo, a casa, a la colonia o el barrio tradicional capitalino, luego de estar así de cerca de las catrinas y los muertos.
En el Zócalo concluyó la procesión de miles de catrinas.
