Revitaliza y deja como nuevos tus muebles de madera con estos consejos de los expertos

Con un poco de ingenio y las herramientas adecuadas, tú puedes revitalizar tus muebles de madera.

Sigue los consejos de los expertos para que quedes totalmente satisfecho/a con el resultado.

Ten a la mano estos materiales: trapo limpio, brocha, cepillo de limpieza, espátula de metal, lija, barniz, cera para madera y pintura.

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Ponte unos guantes de goma y usa una bolsa de basura grande y colócala en el piso para hacer una base. Luego, retira los cajones de los muebles de madera que quieras arreglar.

Con el tiempo, a los muebles de madera se les empiezan a hacer hoyos y es común que dentro de ellos se acumule el polvo. La primera opción de limpieza es usar un paño húmedo y pasarlo suavemente por la superficie, haciendo cierta fuerza en las áreas que tengan orificios.

La segunda es utilizando un cepillo, el cual debes pasar con sutileza por todo el mueble.

Cuando ya tengas la madera limpia, lija delicadamente las superficies dañadas hasta que queden lisas.

Si el daño es muy grande, lija lo suficiente como para que las orillas de la parte afectada estén pulidas. Una vez que termines, limpia el polvo restante con el cepillo.

Al aplicar barniz sobre la madera, la proteges de manchas, desgaste y humedad.

Antes de hacerlo prepara tu lugar de trabajo: abre las ventanas para que circule el aire, protege el suelo y asegúrate que sea un día soleado para que la aplicación seque rápido.

Con una brocha pasa una capa pareja sobre toda la superficie del mueble.

Si te gusta el tono que tiene tu madera, con el barniz quedará más que listo. Si, además de repararlo, quieres darle un ‘look’ renovado, puedes aplicar alguna pintura especial.

La manera más eficaz de hacerlo es con un producto en spray, el cual debes aplicar desde una distancia de al menos 15 cm. Experimenta con otros tonos para darle un aspecto totalmente diferente.

Si las puertas ya no cierran o los cajones no corren bien, éste es buen momento para arreglarlos y devolverle su funcionalidad.

Una opción es instalar nuevas jaladeras en los cajones y apretar los tornillos flojos de las puertas.

(Fotos: Ilustrativa Unsplash)

Analiza cada parte con atención, abre y cierra, mira de qué manera puedes aligerar o suavizar los movimientos típicos del mueble.

Tal vez necesites clavos, pegamento de carpintero, tornillos o algún anticorrosivo para aceitar objetos de metal.

Un consejo extra, los arañazos superficiales pueden cubrirse con cera en pasta dura. Aplícala con ayuda de una esponja de acero suave, frotando en el sentido de la veta de la madera. Luego, solo hay dejar que la cera se seque bien y pule la zona con un paño suave.

EL DATO

Hay muebles antiguos en los que los artesanos no emplearon ni un solo clavo, ni tornillos. Había carpinteros que hacían todo a mano, hacían hoyos en la madera y luego colocaban tiras justas, para “amarrar todo”. Incluso, hacían cortes diagonales precisos en las tablas para que embonaran y que quedarán fijas para siempre.

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