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En un recorrido, se documentó que el puente mide poco más de dos metros de ancho, por lo que el auto que mide 1.76 metros de ancho, pasó casi rozando con sus espejos los muros.
Habitantes señalaron que el puente fue construido en la década de los 60 y que cuando cruza mucha gente se siente cómo se mueve; además, tiene estructuras metálicas de anuncios espectaculares que ponen en riesgo su capacidad de carga, y sobresalen varillas.
“Dicen que no sufrió daños, pero vea sus escalones, están todos despostillados y raspados”, indicaron vecinos de Santa María Nativitas que cruzan al fraccionamiento El Mirador.
El 19 de abril de 2021 ya el conductor de un taxi de la CDMX también cruzó por este paso peatonal y se quedó atorado en la escalinata.