"Los vehículos eléctricos no solo son cero emisiones, sino que también tienen un costo de operación mucho menor al de los vehículos de combustión interna. Sin embargo, los modelos disponibles actualmente en el mercado son caros y no están al alcance de la mayoría de las familias mexicanas. Eso es lo que buscamos cambiar con Olinia”, señaló Capuano.
El portafolio de Olinia presenta tres modelos en atención a las distintas necesidades de movilidad en las distintas ciudades del país, buscando brindar una opción más segura ante el incremento de accidentes viales en motocicletas u otros vehículos eléctricos.
Personal: pensados en jóvenes, madres que lleven a sus hijos a la escuela, y personas que en la actualidad prefieren transportarse en motocicletas.
Barrio: para sustituir los moto-taxis que operan en distintos puntos del país.
Entregas de última milla: pensados en el sector de comercio electrónico y aplicaciones de conveniencia.
Capuano destacó que el 70% de la población mexicana vive en zonas urbanas donde el 80% de las necesidades de movilidad diarias son recorridos de menos de 30 kilómetros.
"En países similares (como China o India), los mini vehículos eléctricos ya se utilizan como patrullas, soluciones de movilidad personal y alternativas al moto-taxi. Estamos seguros de que estos modelos serán un parteaguas en el mercado mexicano”, agregó Capuano.
Los precios de las unidades rondarán entre los 90 mil y los 150 mil pesos, y aunque aún no hay un diseño y falta definir los lugares que será sede para la producción de las piezas, de espera que se llegue a “la inauguración del mundial de futbol de 2026 en un Olinia”, explicó el coordinador.
Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, señaló que Olinia, qué significa “movimiento” en náhuatl, reducirá los accidentes en motocicleta.
“El objetivo de las armadoras es que pueda haber en zonas estratégicas del país, para que no se incremente el costo de trasladar un vehículo de Yucatán a Sonora, por ejemplo”.