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Ayer, por los rumbos de Ecatepec se abrió el suelo. De forma inesperada, el conductor de una camioneta experimentó por momentos estar en arenas movedizas y hundirse su unidad en la colonia San Carlos. Esa es tan solo una muestra de lo que viven en esa parte del Estado de México, y es que tras las lluvias y en medio del suelo minado por las fugas, calles y avenidas están intransitables. A la vista está todo lo que no hicieron las autoridades, entre ellos Fernando Vilchis, quien ya vive y disfruta su curul, lejos de la infraestructura dañada de Ecatepec, municipio que recién gobernó.
En el Gobierno de la Ciudad de México, están muy ocupados en el diseño de los programas sociales y en organizar excursiones para adultos mayores, pero se han olvidado de otras necesidades que tiene el grueso de la población y que son problemas que se enfrentan día con día. La proliferación de las motos eléctricas y el comercio ambulante, que se adueñan de las calles, se han convertido en un problema para la movilidad de miles de personas, pero eso para las autoridades no es una priodidad, sus ojos e intereses están en otro lado.
