Padres mazahuas acusan a supervisora escolar por inculpar a menor en caso de abuso sexual

CALIMAYA.— El futuro de Martín, de 12 años, es incierto, lamentan sus padres, Salvador y Herlinda. Su hijo, relataron, fue acusado en mayo de ejercer violencia sexual en contra de uno de sus compañeritos de segundo grado, al interior de la escuela primaria Profesora Silvina Jardón. 

Aunque el menor tomó terapia y fue evaluado por el DIF en el colegio le retuvieron sus papeles por lo que temen que no pueda ser inscrito a la secundaria.

De acuerdo con los papás del menor, el asunto no es otro sino el de discriminación por los orígenes mazahuas de la familia, pues aprovechando el desconocimiento del protocolo, los directivos de la instrucción los presionaron a aceptar la culpabilidad de Martín.

Los papás recordaron que el 26 de mayo, sin pruebas suficientes, Diana Patricia Almazán, supervisora de la zona escolar 118, acusó a su hijo y otro menor de estos hechos graves.

“Sólo nos dijeron que la supervisora ya había interrogado a los pequeños y los había descubierto culpables, hicieron una acta y nos hicieron firmar que para darle gusto a los padres de familia”, recordó Salvador Serrano, tutor del niño. 

El menor fue suspendido y canalizado al DIF de Calimaya para que tomara terapia. La institución certificó su salud para seguir con sus estudios.