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Con chaquetas de piel, luces de colores y los teléfonos móviles alzados los asistentes escucharon tres melodías durante la instalación del escenario.
El concierto tendrá una duración de cuatro horas seguidas de pura fiesta y música disco de los setenta y ochenta, contará con 20 bailarines en escena con distintos atuendos, 75 equipos de rayos láser disparando luces en todas direcciones, además de numerosas bocinas de alta potencia y 54 pantallas.
“La Secretaría de Cultura me encargó hacer la discoteca más grande del mundo, con mucha iluminación, rayos láser, pantallas”, dijo Apolinar Silva de la Barrera, director de Polymarchs en un video de sus redes sociales.
Este año no habrá fuegos pirotécnicos como parte de la celebración de Año Nuevo, debido a que el Gobierno de la Ciudad de México prohibió su uso para estas fiestas. En su lugar, el espectáculo será iluminado por luces y láser.
Se implementará un operativo de seguridad, en las inmediaciones del Paseo de la Reforma, desde la Glorieta del Ahuehuete hasta la columna del Ángel de la Independencia.
“Viajamos desde Querétaro, mi esposo, mi hijo y mi suegra en silla de ruedas para ver a Polymarchs, el sonido más famoso de México”, mencionó la señora Teresa.
