A un niño le llamaron 'Coito'
Se cambian el nombre a causa del bullying, en México
Miles de personas han acudido al Registro Civil en el Estado de México a solicitar que modifiquen su nombre por feo, mal escrito o grosero
(Foto: Jorge Alvarado, El Gráfico)
Por Claudia González
El nombre de las personas marca su vida. Al menos ese fue el caso de Isaac, un niño que hasta los ocho años se llamó Zurizadai, el cual no es muy extravagante y tiene origen bíblico.
Sin embargo, se convirtió en el blanco de las burlas de sus compañeros de la escuela, al grado de pedirle a su mamá que no lo llevara más a la escuela, al menos no en los eventos públicos.
Isaac, quien hoy tiene 12 años, padeció ‘bullying’ ocho años. Narró que no hubo un solo día en que sus compañeros de clases no lo hostigaran haciendo combinaciones de su nombre con el de animales, plantas, personajes de caricaturas o de películas.
“Siempre regresaba llorando y no comprendía por qué, su nombre no estaba fuera de lo normal, pero decían que era de niña. Él se sentía incómodo”, recordó Roxana Ayala, su mamá.
ERA COSTOSO. Roxana inicialmente pensó en hacer la modificación, pero era muy costoso, por lo que acudió a la oficialía del municipio de Zinacantepec, de donde son originarios, ahí la orientaron y lograron el cambio.
“Hubo en evento con la presidenta municipal, me pidieron llevar a mi hijo y ahí nos dieron la sorpresa de que ya estaba el cambio, incluso ese día buscaban a la niña Zurizadai; ya era cuestión urgente el cambio, yo misma ya me sentía mal como mamá. ¡Qué daño iba a causar a futuro!”, contó la señora.
MODIFICACIONES. En el Estado de México, el Registro Civil respondió favorablemente a 2 mil 824 solicitudes para modificar un nombre de 2017 a la fecha, por considerar que la forma como fueron llamados los hizo víctimas de ‘bullying’; por ejemplo, hubo casos como Coito, Batman, Superman, Ogüen y Blanca Nieves, informó el director general Mauricio Noguez Ortiz.
Señaló que en 2016 emprendieron una campaña de concientización para las familias: ‘Tu nombre es para siempre’, con la finalidad de que comprendan la trascendencia y la carga emocional que genera el nombre”, precisó.
Explicó que hace unos años, en el Estado de México, se conformó un consejo dictaminador que sugiere a los padres que no pongan un nombre peyorativo que pueda marcar de forma negativa la vida de su hijo.