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Cuando por fin lo encontraron, les aseguró que haría el trabajo, pero que tendrían que esperar, pues había tenido que ocupar el anticipo para pagar una operación de su padre.
Molesta, Guadalupe aseguró que lo demandaría por la vía civil. Sin embargo, un primo le recomendó acudir al Centro de Justicia Alternativa (CJA) del Poder Judicial de la CDMX, a fin de mediar con él y firmar un convenio, pues le aseguró que el juicio sería largo y que gastaría en abogado.
Acudió al CJA para informarse. Le indicaron que el asunto se podía mediar, y que él tendría que estar de acuerdo, por lo que requerían sus datos de contacto para invitarlo.
En la primera sesión, el mediador civil los condujo a expresarse sobre lo ocurrido. Él reconoció que no obró bien, pero apeló a la comprensión de su contraparte, pues no tuvo de otra más que gastar el anticipo; Guadalupe mencionó que comprendía, y que ya no requería el trabajo, solo la devolución del dinero.
En una segunda sesión, Cándido propuso pagar los 24 mil pesos en seis mensualidades, pero Guadalupe indicó que en tres meses.
Finalmente aceptó, y así firmaron el convenio de mediación, el cual, contaba con el valor de una sentencia.