Para los regalos navideños habrá muchos menos iPhones disponibles. Las protestas civiles en China por terminar de una vez por todas con la estrategia “Covid Cero” de su gobierno han subido a tal nivel que grandes fabricas empiezan a sospechar que sus producciones caerán drásticamente.
Los analistas financieros en aquel país han calculado que paros de las maquiladoras chinas, entre las que se encuentra Foxconn, fabricante de iPhone para Apple, podrían reducir hasta en 10% la producción de teléfonos inteligentes, lo que sería una de las peores noticias para la empresa fundada por Steve Jobs de cara a las ventas navideñas.
Según un reporte de la revista ‘Deadline’, en algunas tiendas Apple en Estados Unidos ya hay un desabasto de hasta 40% de teléfonos, el dispositivo más vendido en aquel país.
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Este escenario es muy complicado para la empresa más valiosa del mundo. En 2021 las ventas de iPhone representaron 52% del total de sus ingresos, por lo que las protestas en China pueden ser un golpe directo a sus finanzas.
Por su parte, el nuevo dueño de Twitter aprovechó la tormenta que vive Apple en China para acusarla de censura.
Aunque se desconocen los motivos oficiales de la supuesta censura, Elon Musk aseguró en sus tuits que Apple le ha advertido que podría sacar su aplicación oficial de la tienda de apps.
Extraoficialmente se dice que la postura de Musk por hacer de Twitter una plaza pública, en la que se exprese cualquier forma de ver el mundo, incluidos los supremacistas blancos y cualquier otro grupo con discurso de odio, no es compatible con la filosofía de tolerancia e inclusión de Apple.
Anunciantes importantes han dado un paso atrás ante la filosofía de Twitter en la era de Elon Musk, quien en cambio reactivó la cuenta del expresidente Donald Trump y personalmente ha contribuido a retuitear teorías de la conspiración y símbolos de la supremacía blanca para favorecer “la libertad de expresión”.
