Tengo sexo con el marido de mi vecina

>>Hola, soy joven de 24 años y me dedico a ser acompañante para mujeres, pero hay veces que no tengo erección con alguna clienta porque no me excita. Ya  pensé tomar viagra para estas ocasiones, pero me dijo un amigo que duele el pene y que es algo molesto. ¿Me podrían ayudar? Gracias. Maximiliano O.

Uno de los gajes del oficio es que tu deseo sexual no puede condicionarse por la química entre tú y tus clientas, y esto debe ser parte de tu ideología; por ello este trabajo no es para cualquiera, pues incluso cuando a las personas las obligan a prostituirse, los clientes saben esta condición y en muchas ocasiones es lo que los atrae. Cuando un hombre decide este tipo de trabajo debe estar consciente de que las respuestas sexuales de hombres y mujeres son distintas y que además, los cuerpos reaccionan de diferente manera. La mujer puede ser penetrada estando o no excitada, el hombre no puede penetrar si erección y para que ésta ocurra requiere excitarse. El viagra no actúa sin deseo sexual, lo que hace es ayudar a que el pene se erecte cuando el deseo existe, pero el flujo de sangre no es suficiente. Como es un fármaco que actúa sobre el sistema cardiovascular debe ser prescrito por un médico. Medita bien si en realidad sirves para este oficio de proveedor sexual.

>>Tengo sexo con el marido de mi vecina, ella no lo sabe. Ella no es mi amiga, pero no sé cómo tratar la situación cuando nos encontramos. Sofía Z.

Para que las cosas sean equivocadas no es necesario que hagamos mal a los amigos, con hacer lo incorrecto a otras personas es suficiente, así como para que generemos la desconfianza en los demás, es decir, no puedes pretender que el hombre casado con el que estás confíe en ti cuando te prestas a su propia traición sin problemas. Cuando uno experimenta de los demás lo que son capaces uno lo toma en cuenta para generarse la imagen e idea de con quien estamos. Si no te es fácil el momento cuando debes interactuar con la vecina es señal de que tu sentimiento de culpa está activado. Una terapia psicológica te puede ayudar a decubrir por qué te vinculas con hombres prohibidos y traicioneros.

>>Soy un hombre de 33 años casado ya hace ocho años, resulta que con mi esposa tengo relaciones muy activas, casi a diario, la verdad la pasamos bien juntos, pero hace algunos meses, siempre que está muy excitada, trata de meterme sus dedos. La verdad a mi me incómoda, no me agrada, pero ella dice que yo sí lo hago a menudo y que ella también debe poder hacerlo, insiste mucho; la última vez estaba en la clásica posición de perrito, y de pronto estiró  su mano hasta llegar a mi ano, y trato de meterlo, aún en esa posición tan incómoda. No sé si sea normal, no soy gay y pienso que si lo hago podría sentirme súper gay. Ayuda, por favor. René I.

Ciertamente es el sentir de muchos hombres y a pesar de que esto no es así, cuando a una persona una caricia no le gusta hay que respetarlo. La comunicación clara con la pareja es la mejor herramienta que tienen, tan es importante su placer como el tuyo, y ambos deben respetarse y satisfacerse, para estos casos la ayuda de un sexólogo es muy importante pues les puede ayudar no a mediar, sino a definir la manera en que ambos salgan beneficiados y satisfechos.