Atentados en eventos deportivos
La tragedia en el maratón de Boston no es el único suceso que ha empañado un acto deportivo. Aquí un recuento de los mismos
El maratón de Boston de este 2013 se tiñó de negro, luego de que se registraran la explosión de dos artefactos muy cercanos a la línea de meta de dicha carrera, producto de lo que pareciera ser un atentado en la ciudad del estado de Massachusetts.
De acuerdo a abc.es, todo ocurrió pasadas las dos de la tarde, cuando el último pelotón de los más de 26 mil corredores que participaron en la competencia, se acercaban al tramo final del certamen. De repente, se escuchó la detonación y se vio que salía fuego justo en donde se encontraba una de las vallas que separaba al público de los maratonistas.
Desgraciadamente, el hecho cobró la vida de dos personas, entre ellos un niño de ocho años de edad, y ha dejado a más de un centenar de personas heridas, entre los que se encuentran participantes, público en general, familiares y reporteros que presenciaban la 117 edición de dicho maratón.
No es la primera vez que en la esfera del deporte ocurre un hecho similar a este. En El Gráfico, con ayuda de elnuevodia.com y lanacion.com.ar, hicimos un recuento de otros atentados que han empañado grandes eventos deportivos.
Los Juegos Olímpicos de 1972, celebrados en la ciudad de Múnich, fueron testigos de una de las historias más tristes de todo el Olimpismo, cuando en la segunda semana de competición, un grupo terrorista palestino llamado “Septiembre Negro”, secuestró a once atletas de la delegación de Israel, hecho que culminó un par de días más tarde con la muerte de 17 personas.
En el 2008, el rally Dakar tuvo que trasladarse a Sudamérica, luego de que por bastantes años se celebrara en el continente africano, ya que constantemente los participantes eran atacados por gente de la región y ese mismo año, Al Qaeda amenazó con llevar a cabo un acto terrorista en el desierto de Mauritania.
También en 2008, ocurrió un atentado suicida en el maratón celebrado en Sri Lanka, ocurriendo una enrome explosión justo cuando los competidores del evento se disponían a iniciar la competencia. Aquella vez, 13 personas perdieron la vida y 90 resultaron heridas.
Las Olimpiadas de Atlanta ’96 también dieron de qué hablar, luego de que el 27 de julio de aquel año se suscitará la explosión de una bomba casera en el Parque del Centenario, muy cerca del Estadio Olímpico, lo cual provocó el fallecimiento de dos personas y al menos un centenar de heridos.
En 2010, más de 100 pakistaníes perdieron la vida, producto de un atentado con un coche bomba que estalló justo en el sitio en donde se llevaba a cabo un partido de voleibol.
En ese mismo año, la selección de futbol de Togo fue presa de un grupo terrorista perteneciente al Frente para la Liberación del enclave de Cabinda (FLEC), quienes los atacaron durante un viaje en autobús, hecho que cobró la vida del chofer, del jefe de prensa del equipo y de uno de los asistentes técnicos.
En mayo de 1992, el grupo terrorista vasco ETA, puso un coche bomba a las afueras del estadio Vicente Calderón, cuya explosión dejó como saldo a nueve personas heridas que asistirían al partido Atlético de Madrid- Logroñés.
En Irak, en la ciudad de Tal Afar, muy cerca de Bagdad, en el 2010, murieron 25 personas y muchas más resultaron heridas cuando explotó un coche bomba a las afueras de estadio, al mismo tiempo que un hombre hizo estallar un cinturón lleno de explosivos en las gradas del recinto deportivo.
En el 2000, tres personas resultaron con heridas leves, luego de que una carta bomba explotara en las gradas de un estadio italiano, en donde se disputaba un partido de tercera división entre el Livorno y Pisa.