Matt Miazga, el nuevo villano del fútbol mexicano

Por Dante Guerra

Bastó que Matt Miazga, defensa de Estados Unidos, se burlara de la estatura del mexicano Diego Lainez para que de inmediato se convirtiera en el futbolista más odiado de los mexicanos. Su actitud nefasta lo coloca como el sucesor de Landon Donovan, al que odiamos durante años.

La cosa estuvo así: al minuto 64 del juego disputado en Nashville, Lainez y Miazga se jalonearon. El mexicano lo encaró, sólo para que el gringo le hiciera señas sobre su pequeña estatura. La actitud de Matt fue en señal de “estoy muy grandote para ti, ni te pongas brinco”.

Entonces llegó Ángel Zaldívar para interceder por Lainez, pero Miazga seguía burlándose. Hasta que Edson Álvarez lo empujó con el pecho. El gringo se achicó y lo acusó con el abanderado.

“Fue una pequeña broma. Es divertido si lo ves desde fuera. Es una guerra mental. Nos metimos en sus cabezas, después tomamos el control del partido y lo ganamos”, declaró Miazga al final del juego.

Edson agregó que “fue cobarde de su parte. Reaccioné por la calentura, porque no quieres que le peguen a ningún compañero”.

¿QUIÉN ES MIAZGA?

Hay que señalar que Miazga mide 1.93 metros, mientras que Lainez llega a los 1.67. Sin duda es una considerable diferencia de estatura, al igual que de talento.

Y es que Lainez cuenta con mayor talento y es más valioso: a sus 18 años, el mexicano está valuado en 1.7 millones de dólares (según Transfermarkt). Ya ha dado el salto de la Sub 21 a la Selección Mayor. Y es considerado el futuro del Tri.

Matt Miazga tiene 23 años, pero a los 21 apenas costaba 170 mil dólares, cuando jugaba en el Red Bull neoyorquino. Es un gigante de la defensa norteamericana, pero su carrera es un recuento de altibajos. En 2016 lo compró el Chelsea, no dio el ancho y lo prestó al Vitesse. 

Tras un paso regular en la Liga holandesa, pasó cedido al Nantes francés, que es de media tabla. 

PROVOCADOR

Hasta el martes, Miazga era un desconocido para México y el mundo. Pero sus burlas lo convirtieron en tendencia y en el más odiado de los mexicanos.

Incluso ya se supo que es un provocador habitual. Cuando jugaba en el Vitesse las cámaras lo atraparon apretándole los genitales a un rival del Herenveen, en enero de este año. 

Y aunque la acción no fue sancionada por el árbitro, su club lo castigó tras ver la repetición. 

Ahora los futboleros mexicanos tienen un nuevo villano: el grandote Matt Miazga, ante quien Lainez nunca se achicó.

Ayer Lainez señaló: “Creo que fue por llamar la atención. La calidad no tiene estatura ni edad. Son situaciones que pasan, no me pegó, no le pegué, no pasa nada”.