FUTBOL
Nuevo técnico de Pumas, Bruno Marioni promete Liguilla y hacer olvidar al América
El timonel asegura que su equipo debe estar en la fase final por su grandeza y que las Águilas son un rival más
(Foto: Ariadna Montoya, El Gráfico)
Tener orden, recuperar la confianza, ver al América como un rival más y calificar a la Liguilla. Así delineó sus metas Bruno Marioni durante su presentación como técnico de los Pumas, club al que no ve en crisis y sí con mucho ánimo de salir de los últimos sitios del Clausura 2019.
El argentino llegó decidido a ganarse, ahora como timonel, el cariño que obtuvo como futbolista al conseguir la corona de goleo y un título en el Clausura 2004.
Y prometió hacerlo a pesar de su corta experiencia como estratega con Venados en el Ascenso MX y de no tener garantías sobre la llegada de refuerzos.
"Yo tomé una institución que debe estar en Liguilla por la grandeza de su gente y de la Universidad, ése es el objetivo", afirmó El Barullo.
"Tener orden es lo primero. Que el equipo tenga ideas claras a la hora de tener el balón. Hay jugadores con la calidad suficiente para sacar buenos resultados".
El estratega reconoció que portar la playera auriazul "trae críticas importantes, pero no creo que Pumas esté en crisis. Veo a los chicos con mucha disposición y espero no sea difícil salir del bache".
Sin embargo, admitió que los felinos tienen el orgullo herido por las dos eliminaciones en Liguilla a manos de las Águilas.
"Le quermos ganar al América, al Atlas, al Querétaro, a todos. Entiendo el dolor de la afición, pero no hay que centrarnos en América. Es un rival más, que tiene su jerarquía. Sólo debemos enfocarnos en el objetivo final, que es calificar".
Marioni aclaró también que no puso como condición la contratación de un refuerzo para ocupar el cargo de timonel auriazul, pues consideró que tiene plantel suficiente para clasificar a la Fiesta Grande.
Los cuestionamientos sobre su escasa experiencia como entrenador, afirmó, no lo inquietan y expresó que hará lo posible para no defraudar al pueblo azul y oro que lo idolatra como jugador.
"Se pone en juego el trabajo, el cariño que me tiene la gente como futbolista es difícil que cambie. Como entrenador seré evaluado por los seguidores y lo que vean que hago con mi equipo es lo que me hará crecer en su corazón".