EL TORO
Temple mental: las lecciones de Fernando Valenzuela para ganar una Serie Mundial
El mensaje del “Toro” fue claro para quien quiere ser una estrella
(Foto: AP)
La histórica Serie Mundial de 1981 consagró a Fernando Valenzuela como una leyenda del beisbol.
Su incomprensible mecánica de lanzamiento, en especial su famosa "screwball" o bola de tornillo, fue descrita por sus manager, Tom Lasorda, como “prácticamente imposible de batear”.
Sin embargo, a minutos de que inicie la Serie Mundial de 2024 en su honor, vale la pena destacar una de las cualidades del sonorense de 20 años que se subió al montículo de los Dodgers para hacer historia: su control mental.
Por eso se dice que la lección de la "Fernandomanía" va más allá del beisbol: el verdadero campeonato comienza en la mente.
"Fernando tenía una madurez increíble para ser un novato. Nada lo perturbaba en el montículo", ha recordado en múltiples entrevistas Steve Yeager, quien fuera su receptor en Los Ángeles.
Esta capacidad de mantener la calma en momentos cruciales quedó evidenciada en el juego 3 de aquella Serie Mundial contra los Yankees, donde, a pesar de no contar con su mejor repertorio de lanzamientos, logró completar el juego para una victoria 5-4.
La "Fernandomanía" no fue producto de la casualidad. Detrás de esa screwball devastadora y su característico movimiento hacia arriba antes de cada lanzamiento, existía una mentalidad forjada en acero.
Pero, ¿cómo se construye ese nivel de autocontrol?
Especialistas en psicología deportiva señalan que el temple mental puede desarrollarse mediante técnicas específicas. El Dr. Ken Ravizza, reconocido psicólogo deportivo, enfatiza la importancia de la respiración: "Es el ancla que nos devuelve al momento presente". La respiración diafragmática, con ciclos de 4-4-4 (inhalación-retención-exhalación), es una herramienta fundamental para mantener la compostura en situaciones de alta presión.
La visualización también juega un papel crucial. La Dra. Nicole Detling recomienda "practicar mentalmente las situaciones difíciles tanto como se practican las habilidades físicas". Esta técnica, que Valenzuela aplicaba intuitivamente, permite anticipar y prepararse para momentos decisivos.
Harvey Dorfman, autor de "The Mental Game of Baseball", destaca la importancia de las rutinas: "Son el antídoto contra la ansiedad". Valenzuela era conocido por su consistente ritual pre-lanzamiento, una práctica que los expertos consideran fundamental para el rendimiento bajo presión.
El mindfulness y la meditación, aunque no eran términos comunes en la época de Valenzuela, son ahora reconocidos como elementos esenciales en la preparación mental de los atletas. Sesiones diarias de 10-15 minutos pueden marcar la diferencia en momentos críticos.
El trabajo con el fracaso es otro aspecto fundamental. La capacidad de Valenzuela para mantener la compostura incluso después de un hit o una carrera en contra era legendaria.
Las estadísticas de Valenzuela en aquella Serie Mundial (17.1 entradas lanzadas, ERA de 4.00) no cuentan la historia completa. Su verdadero legado reside en cómo mantuvo la calma en los momentos más tensos, demostrando que el temple mental no es un don innato, sino una habilidad que puede desarrollarse.
El mensaje del “Toro” fue claro para quien quiere ser una estrella: el autocontrol y la fortaleza mental son tan importantes como las habilidades físicas.