La historia de Karina con la Ciudad de México es muy parecida a un guión de telenovela del Canal de las Estrellas, pero con una honrosa excepción: ella no vino con la idea de buscar ese amor que la catapultara a una vida cómoda y llena de lujos. Ella vino para convertirse en una profesional en la comunicación visual.
“En un principio me interesaba mucho la pintura y dibujo, pero ya en la carrera de diseño y comunicación visual, me enamoré de la fotografía”.
Karina está convencida de que el mundo se puede conocer a través de las imágenes, y no solamente el físico, pues cree que los pensamientos de la gente que aparecen en la fotografía se pueden interpretar.
“Cuando miras las cosas comunes con una perspectiva diferente, encuadras la vida cotidiana como muchas personas no la ven, y eso me interesa”.
—¿Haces foto en la calle?
—La ciudad me mueve y me fascina ese mundo de zombies en los que se convierten los peatones al caminar por la calle, no se pelan entre sí, y andan ensimismados en sus pensamientos. Es interesante ver a las hordas de personas con ese sentimiento de querer ser individual en una sociedad en la que se debe convivir. —¿Has fotografiado un desnudo masculino?
—Sí, dos veces, y la verdad no me gustó, es difícil, como que no puedo pensar bien como dirigirla, no sé, creo que no es muy plástico el desnudo de hombre.
—Quizás no has retratado a los que no son tu tipo, ¿no?
—A mí me gustan los hombres que sean ellos mismos, que disfrute haciendo lo que a él le gusta hacer, ni grandes, ni guapos, pero sí me fijo mucho en los labios y la espalda.
Otra de sus pasiones, además de la fotografía, es recortar frases o secciones de palabras que extrae de libros de superación personal. “Recorto párrafos que me interesan y los pego en un cuaderno que ya parece un librito de mis frases favoritas, y si lo lees, no es tan lógico, como muchas cosas en la vida, y eso me apasiona”.
—¿Tu frase del día?
—Tienes que parecer ser para que te crean, no es tanto ser, sino parecer.
—¿Hoy cómo vienes?, ¿Qué me quieres hacer creer?
—Que soy modelo pero no, soy fotógrafa—, finaliza.