Cientos de hoteles en diversas partes de México tienen historias extraordinarias de encuentros con seres mágicos, con espectros, con fantasmas, esas entidades que en algún momento ya no están entre nosotros materialmente, pero su energía o espíritu continúan vagando. La pregunta: ¿qué los retiene entre nosotros?
Investigadores aseguran que cuando una persona muere de manera accidental no se da cuenta de que ya no pertenece a nuestra realidad, que ya no tiene nada que hacer entre nosotros.
Es importante decir que mientras hay quienes están a punto de morir en algún hospital o en alguna casa refieren que familiares o amigos ya muertos vienen por él, como si se tratara de un proceso de preparación para su partida.
En estos casos los testigos refieren la presencia de una sombra de un niño, sonidos extraños que no podríamos considerar que es algo maligno, ya que si estos aspectos se nos han contado desde hace siglos es porque el ser humano no se ha acostumbrado a la idea de que “un día todos vamos a morir, es lo único seguro en esta vida”, nos lo han dicho los abuelos.
Se dice que en el caso de los accidentados, al parecer, no hay nadie del otro lado que los ayude a encontrar ese camino hacia el más allá.
En la Transcomunicación Instrumental, que es una técnica a través de dispositivos electrónicos para comunicarse con los fallecidos, se refiere que en ese más allá cada una de las personas o los espíritus tiene uno distinto, es decir, ese paraíso es a modo de lo que uno desee. ¿Realmente esto será así?
Desde luego, que esta pregunta la contestaremos cada uno de nosotros cuando ya no estemos en esta dimensión. Son hechos que nos llevan a reflexionar que las personas cuando mueren ya sea de manera natural, por enfermedad o accidental, dejan cosas pendientes y que tienen que regresar para dar ese mensaje de que no pueden estar tranquilos.
Los especialistas dicen que cuando un familiar le llora mucho a quien ya se nos adelantó en el camino, no lo dejan seguir avanzado, pues hay ataduras, no puede continuar con su evolución ya que existe sufrimiento y dolor entre sus familiares; eso no los deja llegar a su destino.
HOTELES, UNA PUERTA AL MÁS ALLÁ
En el mes de marzo de 2017 en el hotel Mazatlán, ubicado en las calles de Nezahualcóyotl y Tizapán, en el Centro Histórico, se afirma que en la habitación 27, un joven bajito de estatura, robusto y rapado se aparece entre las 23:00 y las 03:00 horas.
Quienes refieren haberlo visto señalan que trae una playera negra, así como un pantalón de mezclilla, lo más interesante es que afirman que no han podido observarle los pies.
Nuestro testigo, quien no desea ser identificado, afirmó que una madrugada apenas iba para su cuarto cuando vio que entró esta persona. Corrió para sacarlo ya que al interior se encontraba su pareja, pero al entrar y preguntar “dónde está el tipo que acaba de entrar”, la respuesta fue contundente: “no ha entrado nadie, aquí he estado desde hace rato”.
Cada hotel tiene cientos de historias increíbles que se multiplican por cada habitación que exista; hechos que van desde simplemente descansar, hasta quienes los utilizan como refugio después de haber cometido alguna fechoría.
En Cholula, Puebla, está un hotel muy pintoresco que era una antigua casona, grande y bonita, que se vio afectado por el terremoto del pasado 19 de septiembre.
En el segundo piso, habitación 23 se refiere que se escucha una voz que le habla al huésped al oído exactamente a las 7:00 de la mañana “ya levántate, ya es tarde…”, al momento que el testigo abre los ojos para saber quién le habla, se da cuenta de que no hay nadie en esa habitación, pero si esa persona no se levanta, hay una extraña energía que sacude a las personas que no hicieron caso, es decir, los mueven con tal fuerza que en realidad los despiertan.
Al cuestionar a las encargadas nos refirieron que es normal que en esa habitación sucedan cosas extrañas, pero nadie sabe a qué se debe.
Casos interesantes que suceden en hoteles con historias que existen entre el más allá y nuestra realidad, un binomio muy extraño, pero a su vez perfecto que un día conoceremos todas las respuestas de si en realidad existe la vida más allá de la muerte.