La Procuraduría del estado de México asegura a Guadalupe Reyes y a su esposo Bernardo que ya encontraron a su hija Mariana Elizabeth Yáñez Reyes, desaparecida desde el 17 de septiembre de 2014, “desafortunadamente muerta”.
Según las autoridades, los restos de la joven fueron hallados en una bolsa de plástico en el río de los Remedios. Pero esas mismas autoridades se niegan a entregar formalmente el expediente judicial, dan largas para realizar un segundo estudio de ADN independiente y condicionan la entrega de los restos a la renuncia del expediente.
Como relató El Gráfico, Mariana Elizabeth Yáñez Reyes, de 18 años recién cumplidos, tenía unas semanas de haber ingresado a la licenciatura en el Politécnico.
La noche del 17 de septiembre de 2014 debía sacar copias a algunos documentos para tramitar una beca de estudios al día siguiente. Poco antes de las 9 de la noche avisó a su padre que iba al café internet, salió de su domicilio en Los Héroes, Tecámac, sección Bosques. Iba a no más de tres cuadras. Debía tardarse a lo mucho 20 minutos.
Ya no regresó. Durante meses la carpeta de investigación de Mariana Elizabeth permaneció prácticamente vacía. Pero el 20 de diciembre de 2014 la Fiscalía para personas Desaparecidas, con sede en Toluca, citó a los padres de Mariana. La licenciada Sayonara Encarnación Rosales preguntó:
—La sonrisa de Mariana es muy peculiar. ¿Ustedes podrían reconocer a su hija por la dentadura?
—Sí, ¿pero por qué?, respondió Guadalupe.
La funcionaria les ofreció ver un acervo fotográfico de dentaduras de restos no identificados. En primera instancia Guadalupe se negó.
—¿Por qué se niega?, preguntó la fiscal.
—Porque estoy buscando a una persona con vida.
—Yo les sugiero que acudan a un sicólogo para irse preparando, porque también es una forma de buscarla y encontrarla.
En aquel momento les mandó a hacer una prueba de ADN a otras oficinas en Toluca.
“Mientras estábamos allá, una de las indiscreciones de uno de los ministerios públicos es que acaban de localizar a “40 personas”. En el momento en el que te dicen que localizaron a 40 personas, tú asumes que son personas vivas. Pues no, no es así. Porque después el MP nos dijo: ‘Pero ustedes no quisieron ver ninguno, ¿verdad?’”.
El 12 de enero las funcionarias Dilcya García (subprocuradora para la Atención de Delitos vinculados a la Violencia de Género), la agente Sayonara Encarnación y la maestra Sol Salgado (Trata de Personas) se reunieron con los padres de Mariana Elizabeth para informarles que los resultados de ADN habían coincidido en un 99%, por lo que los restos hallados correspondían a Mariana.
Guadalupe explica por qué quiere hacer un análisis independiente. Recuerda el caso de otra jovencita, Abril Selene Calviño Rodríguez, quien desapareció por el fraccionamiento Real del Cid en 2011. Después de dos años entregaron a la madre unos restos, también hallados en el fondo del río de los Remedios. Según la prueba de ADN realizada por la Procuraduría se trataba de Abril. Hace unos meses se confirmó que eran los restos equivocados. Por eso los padres pidieron ver los restos.
Pero las autoridades se negaron. Desde entonces, a la familia no se le ha permitido tener una copia completa del expediente, tampoco se ha podido realizar un estudio de ADN independiente y como condición para que les den los restos se pide que renuncien al expediente.