Daniel Meza es miembro del cabildo de Atizapán, que finaliza funciones en unos días. Él, junto a algunos otros regidores y organizaciones sociales, pidieron al cabildo pronunciarse para implementar la alerta de género en su municipio.
Advirtieron que éste también forma parte del área metropolitana de la ciudad de México, lo que propicia que sea proclive a problemáticas como ésta. Además, está rodeado de otros municipios con altos índices de delitos de género. Pero este grupo perdió la batalla: el cabildo determinó no pronunciarse al respecto. Alegó que, dado que no tenía facultades al respecto, era una pérdida de tiempo.
Mientras, los casos se acumulan y ni siquiera hay una radiografía completa de la situación en Atizapán.
SHARON ABRIL. El 27 de junio de 2015 la niña Sharon Abril Chávez Espinosa, de 12 años, fue vista por última vez. La evidencia parece indicar que fue enganchada por Facebook. Aquel sábado por la mañana asistió a su curso de computación, llegó a casa y al caer la tarde fue a un centro comercial en compañía de su mamá, Esmeralda Chávez y su hermanita de 11 años.
Por la noche llegaron a casa de los abuelos, en Atizapán de Zaragoza, donde Sharon vivía, cenaron y se fueron a dormir. Al día siguiente la niña ya no estaba. Poco antes de las 7:00 de la mañana la abuela revisó su habitación. La cama estaba vacía. En algún momento de la madrugada Sharon empacó su ropa más nueva y se llevó su celular. Dejó un mensaje: Se iba a hacer una vida, a formar una familia.
Al investigar, los padres supieron que Sharon había conocido a un individuo que dijo llamarse César Daniel Arellano, de 21 años, originario de Veracruz. Consiguieron una fotografía de él. El pretendido “novio” parecía rebasar los 35 años. Y según el dicho de un vecino un hombre muy parecido a “César Daniel” esperaba impaciente a la media noche en la esquina de la casa de la menor.
El de Sharon es un caso que no entra en las estadísticas que maneja el municipio de Atizapán respecto a la violencia de género.
ESTADÍSTICAS. Hay relativamente pocos casos de violencia de género registrados en Atizapan, si se compara con los focos rojos mexiquenses (por ejemplo Chimalhuacán, Ecatepec). Aunque se han presentado casos emblemáticos de violencia de género: por ejemplo el de Georgina Ivonne Ramírez Mora, desaparecida el 30 de ayo de 2011 y cuyo cuerpo fue finalmente localizado en una fosa común en Hidalgo en 2013.
Daniel Meza advierte que uno de los problemas es la falta de información sistematizada. En la comisión de Equidad de Género en el cabildo, explica, se han dado a la tarea de solicitar a diversas instancias las estadísticas de todo tipo: violencia doméstica, delitos de alto impacto como feminicidio o violaciones, trata de personas, etcétera. Hasta la fecha no tienen una radiografía completa, ya que la información es incompleta y fraccionada.
Muchas organizaciones sociales empujaron, desde años atrás, que se implementara la alerta de género en el estado de México, ya que tiene uno de los índices más altos de feminicidios a nivel nacional.
Apenas en julio pasado el gobernador pidió activar la alerta para 11 municipios: Ecatepec, Neza, Valle de Chalco, Toluca, Tlalnepantla, Chimalhuacán, Naucalpan, Tulhtlán, Ixtapaluca, Cuautitlán Izcalli y Chalco. municipios en el estado.
Para muchos fue una victoria parcial, aunque ahora desde el inicio se cuestionó por qué se activó sólo en 11 de los 125 municipios.