Qué onda, mis chulos lectores, ya es marzo y comienza la temporada de calor, shorts, minifaldas y muchísima sensualidad; yo amo el calorcito y la humedad de la temporada de lluvias.
Últimamente, mi imaginación ha estado a todo lo que da. Tengo en la mente una escena que estaría a todo dar con algunos fans, ojalá ¿por qué no? en un futuro se preste la oportunidad y después de conocernos, de todos los exámenes correspondientes, una cenita y algunas cervezas, el ambiente sea perfecto para ponernos a darle.
La idea sería así: después de las cervezas en un bar en donde toquen buen rock, nos movemos hacia un hotel, una habitación grande con alberca, ahí un buen vinito tinto, una playlist para ponernos cachondos y que comience el juego.
Me pondría a bailar sensual, mojada, pero aún con lencería, con todos rodeándome, arrimándole mis boobies y nalgas a cada uno para echarlos a andar; viendo cómo se masajean el pene cuando les empiece a crecer, afuera lloviendo, y dentro yo comenzándome a humedecer entre besos y caricias por todos lados.
Me acostaría en la cama, para que todos pudieran acariciar mi cuerpo, y así me prendieran, apretando mis pezones, masajeado mi clítoris, lamiéndome el abdomen, metiéndome los dedos, tal vez un dedo de un chico y otro de alguien más, los dos dándome placer.
Los sentaría a todos alrededor de mí, y me pasearía frente a ellos desnuda, pasándoles la mano arriba de la cabeza, imagínenme en tacones, contoneando mi cadera, mis tetas botando, hasta que llegue frente a uno de ustedes.
Lo tomaría por el cuello y lo levantaría hasta mi boca para besarlo, luego bajaría lentamente mi lengua rozando su abdomen hasta llegar al pene. Ese me lo metería completo a la boca y comenzaría a succionarlo, y como los demás no se quieren quedar atrás se levantarían para ponerme sus penes cerca de la cara y en mis manos para poder jalárselas.
Me jalarían del cabello para meterme sus penes en la boca, mis dedos comenzarían a masajear mi clítoris hasta lograr un squirt, ya bien húmeda y lista para ser penetrada, me acostaría en la cama, pero con la condición de que de ahora en adelante sólo el chico que elegí podrá penetrarme y los demás se dedicarán a observar y jalársela frente de mí.
Mientras gimo de placer, porque el chico elegido me penetra duro, me excitaría más ver a los otros cerca de mí, disfrutando mi placer. Sería feliz´al sentir cómo uno por uno eyaculan sobre mi cuerpo, en mis tetas, sentirlos escurrir tan calientes por mi abdomen, ver cómo se quedan en mi ombligo, cerrar los ojos para que pudieran echármelos en la cara.
Al final, meterme a la alberca para darme una remojada relajante, agradecerles a todos y abrigarnos bien antes de salir al olor de la lluvia y fumarnos un cigarro para cerrar ese gran trato.
Sin duda sería una escena maravillosa, en donde más de uno saldría contento, ¿te imaginas en una de mis escenas? Mándenme un correo y díganme por qué creen que estaría genial grabar una escena conmigo y cómo la haríamos, ya saben es a [email protected]. Besos, mis chulos y nos leemos el próximo miércoles.
