Aunque dicen que los ingredientes principales de estos tamales son el amor, la dedicación y la perseverancia, aquí no se pueden pasar desapercibidas las inmensas porciones de ingredientes que hacen de los “Tamales Doña Emi”, unos de los más requeridos en la ciudad.
De tamaño considerable y atiborrado de champiñones, puerco, pollo, lomo, higo con queso filadelfia y hasta de queso con zarzamora, sus tamales se resguardan bajo una lona verde y entre las cuatro paredes de un local que esconde casi 60 años de historia.
Los comenzó Hermilia Galván Sánchez, pero cuando su nieta María del Carmen López cuenta sobre el inicio del local, no se habla precisamente sobre la preparación del tamal.
Un puesto de fruta picada dentro del Deportivo Hacienda dio inicio al aclamado negocio. Dicen que la época de lluvia orilló a Hermilia a buscar una nueva alternativa para vender, así que retomando las recetas de su pueblo Ozumba, del Estado de México, empezó a elaborar cuatro cinco variedades de tamal.
Desde los clásicos de salsa verde, mole, dulce, algunos de rajas y con su especialidad preparada con hongo clavito, sus vaporeras montadas en un carrito de madera, salieron a las calles mientras recorrían las calles de la colonia Roma y la Condesa. Hoy 59 años después, María del Carmen sigue con la tradición y con los mismos tamales.
Aquí es imprescindible llegar temprano, pues aunque cierran a medio día, sus tamales colosales rinden hasta poco antes de las diez.
Hoy el hongo clavito se sustituyó por el champiñón y surgieron poco más de diez tamales más, acompañados de queso y hasta de huitlacoche, pero del sabor nadie puede quejarse. Envueltos de masa de maíz, tienen una textura suavecita pero que no se desmorona y absorbente sin estropear su consistencia.
Entre sus especialidades se pueden encontrar el de lomo con aceitunas, que se recomienda para aquellos que gustan del picante y los sabores jugosos. El relleno de mole, que María del Carmen asegura que se cocina artesanalmente y con una receta casera, de huitlacoche con queso de cabra o queso Oaxaca que tiene sabores más secos pero igual de apetitosos, de champiñones con puerco bañado en una salsita verde que empapa toda la carne o los dulces preparados con fruta natural: guayaba, piña, zarzamora o higo con nuez.
Pero las estrellas de la casa son los de rajas con queso y el de “champiqueso”; tamales que llevan la receta original de doña Hermilia. De sabores salados pero bien preparados, sus tamales son tan consistentes que sentirás que estás comiendo un guisado acompañado de una tortilla suavecita de maíz. Además, puedes acompañar tus tamales con champurrado preparado con masa o con atoles elaborados con leche de granja y trocitos de fruta.
Visítalos de lunes a sábado de 8:00 a.m a 11:00 a.m. sobre la calle Jalapa esquina con Tlaxcala, local B, en la colonia Roma.
Huevómetro: 5 estrellas
Plato estrella: Champiqueso o rajas con queso. Los tradicionales tamales de Hermilia con una receta de casi 60 años.