La psicoterapia ayuda a reducir el estrés, aliviar la ansiedad y levantar el ánimo. Sin embargo, las personas que más necesitan de la terapia psicológica y quienes más se podrían beneficiar de ella son las que menos buscan ayuda profesional. Muchos postergan la consulta de un profesional y continúan sufriendo innecesariamente. Para otros, una situación sencilla que podría haberse resuelto en unas cuantas sesiones, se convierte en un gran problema, todo por no consultar a un psicólogo, terapeuta o consejero a tiempo. ¿Cuándo es necesario buscar ayuda profesional en un psicólogo o terapeuta? Aquí te damos la respuesta.
Nada de lo realizado te ha funcionado
Si ya has utilizado libros de autoayuda, acudido a grupos de apoyo, tomado tratamientos alternativos o farmacológicos, hablado con amigos y familiares sobre el asunto, y no ha sido suficiente para aliviar tu aflicción, ya tendrías que haber consultado a un terapeuta. Si estás deprimido, ansioso, agitado o demasiado abrumado para llevar tu vida con normalidad, necesitas apoyo de un profesional de la salud mental y emocional. Es probable que estés enfrentando cambios o hayas sufrido la pérdida del trabajo o de alguien querido. En un tratamiento psicológico aprendes a lidiar con los cambios y a superar pérdidas.
Demasiada intensidad
Si tienes una tendencia a ver las cosas catastróficamente y a asumir los peores resultados en una situación, bien valdría la pena consultar a un terapeuta sobre cómo manejar tu ansiedad y moderar la intensidad de tus reacciones. La terapia es también una experiencia de aprendizaje. La tendencia a ver las cosas con fatalismo produce ansiedad paralizante y puede provocar ataques de pánico o fobias limitantes.
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