La eyaculación retardada podría ser molesta para la pareja que ya obtuvo uno o varios orgasmos y ya no hay lubricación vaginal, lo que puede causar dolor
Con eso de que la eyaculación precoz parece ser el enemigo número uno de las parejas, la eyaculación retrógrada es difícil de ver en los hombres que la enfrentan y la disimulan bajo la imagen de un amante “perfecto”.
La eyaculación retardada es la situación en la cual el varón logra excitarse, consigue una buena erección, pero no es capaz de desencadenar el reflejo eyaculatorio y, si lo logra, es muy tardíamente, generalmente cuando su pareja ya obtuvo su orgasmo y la lubricación vaginal ha desaparecido, lo que hace que las embestidas pélvicas vuelvan doloroso el coito.
Ante tal situación, los hombres que padecen esto suelen fingir también el orgasmo y además argumentan que han evitado eyacular porque tienen un gran control de ello, y no pocos leen un par de tips sobre sexo tántrico para hacer más real la mentira.
Por lo general, los inicios del juego sexual son normales, la erección se presenta y la excitación también, pero conforme avanza el tocamiento y el momento de la penetración, el varón está tan ansioso que es fácil que la pareja lo note, pues deja de prestar atención a las necesidades y gustos de ella por tratar de conseguir, como sea, la eyaculación.
Es aquí donde todo se ve que el alargar tanto el coito tiene una razón muy distinta al tantrismo y que tanta atención a la pareja en realidad es un ganar tiempo para ver si llega la eyaculación y con él, el orgasmo.
Todos los hombres pueden llegar a presentarla en algún momento de sus vidas. Muchos de ellos, ante la tensión que generan por no poder acabar con el acto sexual, recurren a varias maniobras.
Por un lado, algunos fingen que terminan, otros siguen intentándolo hasta que pierden la erección y, por ende, acaba el acto sexual sin eyaculación.
Otros sólo pueden terminar con estimulación manual.
La mitad de los varones que padecen de una eyaculación retardada o ausente tienen problemas hormonales de fondo.
La otra mitad son hombres que están tan preocupados por que su pareja disfrute el acto sexual y de no ser eyaculadores precoces, que retrasan ésta hasta un punto en que sencillamente desaparece.
Este trastorno suele darse cuando hay problemas con la pareja o en hombres que han sido educados más estrictamente.
Muchos pueden tener dificultad para expresar emociones y dejarse llevar en el momento de tener relaciones sexuales.
La eyaculación retardada suele limitarse clínicamente a la incapacidad de eyaculación durante el acto sexual de pareja y suele no existir problemas con la masturbación.
Como todas las disfunciones sexuales, tiene solución y es necesario que un médico haga exámenes pertinentes para saber su origen y corregirlo, y disfrutar de una vida sexual plena.