El término es para designar personas que son heterosexuales, pero no le ‘hacen el fuchi’ a las relaciones o a algunas expresiones eróticas con personas de su mismo sexo. En pocas palabras, no son gays ni lesbianas pero… pueden tener un ‘resbalón’ por ahí.
Se dice que la heteroflexibilidad es una forma de orientación sexual o comportamiento sexual situacional, es decir, que sólo se da en ciertas ocasiones, bajo determinadas condiciones.
Al factor que lleva a estas personas a ser flexibles se le conoce como bicuriosidad, es decir, curiosidad por ambos sexos, que da pauta a la bisexualidad, personas que tienen relaciones eróticas igual con parejas de su mismo sexo o del otro. Las razones para la heteroflexibildad son muchas: por diversión, romper la monotonía marital, necesidad de autonomía, inicio de su sexualidad, como aprendizaje. Compra El Gráfico y descubre un test sobre este tema en tu edicióm impresa de hoy.