Cuando se habla de condones, todas las veces se piensa en esa funda de látex que cubre al pene y casi nunca se toma en cuenta que los hay para la boca, justo para usarse en el sexo oral.
Y es que al sexo oral muchos le entran, el problema es que lo hacen mal. Y no precisamente en cuanto a la técnica, sino en las precauciones que se deben tomar, pues como toda práctica sexual tiene sus riesgos.
Si bien por esta vía no hay posibilidad de embarazo, no por ello debemos llamarle práctica de sexo seguro; por el contrario, la saliva y la sangre de las encías son los vehículos propicios para la transmisión de enfermedades, de ahí la importancia de usar un método que ayude a evitar el contagio.
Las barreras dentales son piezas de látex o silicona muy delgadas y flexibles que se usa durante el sexo oral vaginal también llamado ‘cunnilingus’ o en el sexo oral anal, conocido como ‘rimming’. Para la felación, el condón tradicional es el que se debe usar sobre el pene y no como barrera en la boca.
Estas barreras dentales han demostrado ser muy efectivas para reducir las infecciones por enfermedades de transmisión sexual. Y se usan bajo estos siguientes pasos:
1. Al sacarse de la bolsa que los contiene hay que lavar el polvo que tiene con agua. Esto con el fin de que este polvo no se quede en la lengua.
2. Hay que revisar que la barrera de látex no tenga huecos o perforaciones. Si existe este tipo de defectos, el nivel de protección baja considerablemente.
3. Se debe aplicar una cantidad de lubricante a base de agua en la vagina o en el ano. Esto con el fin de que la lengua y labios resbalen más fácilmente y haya menos fricción entre ambas zonas previniendo así rozaduras.
4. Quien hace el sexo oral debe mantener la barrera bucal colocada todo el tiempo en los genitales de la persona que lo recibe, de otra manera la protección no es efectiva.
5. No se debe voltear la barrera durante el sexo oral ni mucho menos usar la misma en dos partes diferentes del cuerpo, como podría ser de la vagina al ano o viceversa.
6. Al igual que los condones tradicionales, estas barreras nunca se debe usar más de una vez.
Si no se tienen estas barreras bucales, pueden improvisarse algunas con plástico para envoltura de comida, que se coloca sobre la vulva para practicar el ‘cunnilingus’, pero no es propio para la felación ya que no es viable enfundar con esto el pene.
También se puede usar un condón normal y cortarlo con el fin de cubrir la zona de la vulva. Se cree que este tipo de protección resta sensibilidad a la mujer, pero en realidad bien usada es poco percibida.
Tip*
En el caso de la felación, el uso del condón no resta tampoco mucha sensibilidad al pene, sobre todo cuando ésta se basa en la succión y presión del miembro con la boca y no sólo con lamerlo.