La palabra probióticos está de moda y aparece ligada a alimentos y otros productos, se trata de un agente cuyo estudio es ancestral, con la medicina tradicional china.
Probiótico significa en favor de la vida y se refiere a los microorganismos que tienen efectos benéficos para humanos y animales. Son bacterias y levaduras buenas para el organismo cuando se administran en cantidades adecuadas.
Cosas buenas. La nutrióloga Elisa Gómez menciona que los beneficios de los probióticos se asocian al sistema digestivo y se ligan ahora a la salud metabólica, control de peso corporal y prevención de enfermedades autoinmunes e inclusive se han utilizado en casos de autismo.
Estos agentes deben suministrarse en cantidades adecuadas, esto quiere decir “contar con un número de microorganismos capaces de realizar una función o colonizar al intestino, estómago o boca”, recomienda la especialista.
Los pueden consumir todas las personas, sobre todo aquellas que padecen algún trastorno digestivo o bien, quienes buscan mejorar su salud gastrointestinal, también los pequeños pueden beneficiarse con el consumo de probióticos.
Los efectos en áreas de nutrición han sido documentados ya que previenen el desequilibrio de la microbiota intestinal, mejoran la absorción de nutrimentos y la asimilación de oligoelementos, entre otras acciones.
Más y mejor beneficio. Son buenos para todo mundo, pero la experta en nutrición nos dice que “benefician principalmente a los bebés, adultos mayores (pues con el paso del tiempo se pierde la biodiversidad de las bacterias del intestino) y mujeres embarazadas”.
Sobre qué es mejor, consumir alimentos o suplementos con probióticos, menciona que existen alimentos que contienen microorganismos vivos, pero en ellos no siempre se encuentra la cantidad adecuada.
La mayoría de los probióticos en los alimentos necesitan tener una cadena en frío, lo cual indica que un alimento/producto que estuvo expuesto al sol carecerá de ellos.
En los alimentos no siempre se pueden identificar a los específicos y, finalmente, éstos funcionan para cumplir con un estilo de vida saludable y no un fin terapéutico.
En todo caso, dice, los probióticos forman parte de la microbiota intestinal humana normal, el objetivo de tomarlos es contribuir a la recolonización de organismos comensales.
La nutrióloga asegura que existen nuevos resultados que avalan su eficacia en pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal, Síndrome de Intestino Irritable (coloquialmente conocido como colitis nerviosa) y pacientes con enfermedades del hígado.
“Cualquier persona que tenga una microbiota intestinal saludable se piensa que en el futuro tendrá un menor riesgo de tener enfermedades metabólicas”, según la especialista.