Hay mucho de cierto en la idea que la felicidad es una elección, más allá que la genética y las circunstancias de vida intervienen en el nivel de felicidad de una persona, es cierto que cada quien puede tener cierto control.
Charlene Martin Lillie especialista en resiliencia y guía de pacientes en Mayo Clinic deja en claro que es poco realista pensar que con solo chasquear los dedos y decidir ser feliz, se logra el sueño:
“Si eres más consciente de tu realidad, agradecido por lo que tienes y más relajado en tus actitudes, es probable que te sientas más alegre”, afirma.
Claves y cosas de la felicidad. La experta recomienda probar las maneras de aumentar la felicidad:
1. Vuelve a conectarte con lo que te causa alegría. Desde lanzar una pelota de beisbol hasta tomar clases de arte, todos tienen actividades que solían disfrutar. Tal vez una rutina ajetreada o el envejecimiento del cuerpo te han hecho renunciar a este hábito o te han hecho creer que deberías dejarlo. Prueba nuevamente esas actividades divertidas.
2. Desconéctate de tus problemas. ¿Alguna vez te has sentido tan involucrado con algo que el tiempo parece detenerse y tus preocupaciones desaparecen? Esto se llama “estar en estado de flujo”. Tocar un instrumento musical y perderse en la lectura de un buen libro son ejemplos de cómo puedes meterte en el flujo.
3. Busca algo nuevo cada día. Tu cerebro se siente atraído por las cosas que son nuevas o novedosas. Cuando estás prestando atención a algo nuevo, te centras en el momento presente, lo que puede aumentar la sensación de felicidad. Involucra al cerebro buscando algo nuevo o viendo algo de una manera nueva.
4. Ponte en primer lugar. Encontrar el equilibrio depende de ti. Si llevas una agenda, agrega algo, al menos una vez a la semana que sea solo para ti.
5. Pasar tiempo en la naturaleza puede reducir el estrés y aumentar las sensaciones de vitalidad, asombro, gratitud y compasión.
Comienza paso a paso.
1. Haz una lista de actividades que solías disfrutar, pero que has abandonado. Reconéctate con una, dedícale al menos dos semanas. Fíjate si esta actividad te hace sentir más feliz.
2. Disfruta de estar al aire libre al menos 10 minutos por día. Presta atención a todo lo que te rodea y percibe cómo te sientes.
3. Reflexiona acerca de las cosas que te han causado felicidad o desdicha en el pasado.