El consumo de carne es puesto bajo la lupa y se le achaca ser detonador de ciertos males, pero comerla de manera moderada es parte de una dieta saludable que puede traerte muchos beneficios.
Según el Instituto de Nutrición INSA, disfrutar de las carnes en general y sus productos en un menú que incluya todos los grupos de alimentos, además de la práctica de un estilo de vida saludable.
Puntos a favor. La nutrióloga María de los Ángeles Aedo Santos, ligada al INSA, pone los puntos sobre las íes sobre la carne y su lugar en la mesa mexicana:
1. Las proteínas que se obtienen de la carne poseen aminoácidos esenciales para tener un cuerpo sano y fuerte. Las proteínas de vegetales son menos, además que su contenido es proporcionalmente muy bajo, de modo que habría que consumir grandes cantidades o combinar varios tipos de verduras para compensar las deficiencias. Por ello, es más conveniente consumirlos en alimentos de origen animal.
2. La carne aporta lisina, que ayuda a formar células de defensa ante enfermedades y que es escasa en vegetales.
3. Es la principal fuente de hierro hem (que contiene la sangre) y es más beneficioso para el organismo, pues se absorbe fácilmente, en mayor cantidad y ayuda en la asimilación del hierro proveniente de otros alimentos.
4. Es una fuente de otros minerales como selenio, magnesio, zinc, fósforo y potasio, componentes esenciales para la formación y recuperación de músculos, en la transmisión neuromuscular y en la síntesis de múltiples enzimas del organismo.
5. Consumir carne aporta vitamina B12, esencial para el metabolismo del sistema nervioso y las células sanguíneas, estimula la adecuada formación de glóbulos rojos para que todo tu organismo se mantenga en buen estado. La deficiencia de esta vitamina ocasiona cansancio e incluso lleva a la anemia.
Los grupos de alimentos.
• Frutas y verduras: que deben consumirse en una cantidad mínima de 5 porciones (1 porción = 1 medida de tu puño) al día.
• Cereales: De preferencia consumirlos integrales.
• Alimentos de origen animal y leguminosas: carne, la roja, tiene grasa saturada natural y otros elementos que se forman al prepararla, por lo que hay que consumirla dos veces por semana. Las leguminosas contienen proteína, hidratos de carbono y fibra.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que un estilo de vida saludable es el que asegura el consumo diario de frutas, verduras, cereales, leguminosas y alimentos de origen animal, además de un consumo de grasas equilibrado y una reducción en la ingesta de azúcar añadida y sal.