La moda de poner en el banquillo a alimentos tradicionalmente buenos alcanzó a la leche, pero más allá de los dichos son reconocidos en todo el mundo y desde 2001 la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) promueve su consumo y celebra sus propiedades nutritivas.
Para empezar, expertos en lácteos dicen que es el alimento puro más próximo a la perfección, su principal proteína, la caseína, contiene aminoácidos esenciales y es fuente de calcio, fósforo y riboflavina (vitamina B12).
Todos estos nutrientes contribuyen significativamente a los requerimientos de vitamina A y B1 (tiamina) de cualquier persona.
Cosas buenas de la leche. Este alimento lácteo se puede conseguir en diferentes presentaciones: polvo, condensada, evaporada, sin lactosa, semidescremada, baja en grasas y por supuesto, entera.
Un detalle, Jalisco es el líder nacional en producción de leche entera con más de 2,000 millones de litros al año.
Fácil de consumir. La leche se consume fría, tibia o caliente, generalmente se sirve sola o con chocolate, su combinación es infinita, está el clásico licuado de plátano, fresa, mamey o cereales, hasta los refrescantes smoothies, receta que además de la fruta incluye yogurth, hielo, azúcar y canela.
En la cocina, es ingrediente esencial para la preparación de postres como natillas, paletas, helados, gelatinas, flanes, pasteles, pan, arroz con leche y atoles; también juega un papel importante en platillos salados como las cremas, pastas y salsas, así como en artesanales, entre ellos queso, yogurt y crema.
Incluir en la dieta habitual leche y derivados como queso, crema y yogurt es necesario para la salud familiar, en especial, en niños, adolescentes y adultos mayores.
La elaboración de derivados y fermentos lácteos, en febrero de 2017 alcanzó las 183,211 toneladas, con un valor de 7,791 millones de pesos, indican de la SAGARPA.