CHARRO DE ACERO
Cáncer, trombosis y otros males que alejaron a Vicente Fernández de los escenarios
(Foto: Carlos Mejía/ El Gráfico)
Fue en 2016, a la edad de 76 años, cuando Vicente Fernández realizó su último concierto en el majestuoso Estadio Azteca y, aunque fue una de sus presentaciones más entrañables, la verdad es que su retiro fue obligado por los padecimientos que ya le cobraban factura.
Una larga lista de enfermedades hicieron ver mal a Vicente, quien durante décadas padeció, al grado de obligarlo a convivir con un médico las 24 horas del día, para poder estar al tanto de su salud en todo momento y tener los malestares controlados.
Casi dos décadas atrás, le fue diagnosticado por primera vez un cáncer de próstata, una batalla donde luchó sin darle muchos reflectores, hasta que lo dio a conocer cuando ya casi libraba el mal. "El cáncer es como una gripe. Si te agarra débil no la haces, pero yo siempre he sido un hombre de mucha fortaleza", comentó a People en su momento.
Sin embargo, en 2012 su salud de nueva cuenta se vio mermada por lo que debió suspender su gira ‘Mi despedida’, a causa del descubrimiento de una ‘anomalía’ en su hígado. Otra vez el cáncer se había instalado en su cuerpo.
Así, el 8 de noviembre del mismo año fue intervenido quirúrgicamente en la Universidad de Illinois. Y aunque el tumor fue extraído en su totalidad (junto al 40% del órgano), en ese momento el charro temió por su vida. “Le di la bendición a mis hijos y me despedí de mi vieja, le pedí perdón si acaso le falté el respeto en algún momento”, manifestó.
Gracias a la fortaleza de la cual siempre presumió, Fernández tuvo una pronta recuperación, pero a tan solo un año, ahora fueron sus pulmones los que le jugaron una mala pasada, así, en agosto de 2013 fue ingresado de urgencia en Guadalajara debido a una trombosis.
Un coágulo que afectó sus vías respiratorias y, como consecuencia, lo dejó temporalmente sin voz. Pero Vicente volvió a ‘domar’ al ‘caballo’ de las enfermedades, con lo que logró continuar con el tour de despedida que había extendido por tantos años.
Pero no todo fue miel sobre hojuelas, ya que en marzo de 2015, "Chente" tuvo que ser sometido a una cirugía abdominal, a raíz del hallazgo de una hernia ventral. Pero, en medio de la operación, los doctores se dieron cuenta que no se trababa de una sola, sino tres.
Y la ‘cereza’ en el pastel fue durante su concierto final en el Estadio Azteca en la Ciudad de México, donde una de sus rodillas presentó algunas complicaciones como la hinchazón, lo que le impedía mantenerse de pie por momentos muy largos. Finalmente, Vicente logró manejar todas sus dolencias y se presentó su “adiós” el 16 de abril de 2016 ante una multitud.
“Doy gracias a Dios por cada día que me regala. Siempre he dicho que he sido muy bendecido por poder disfrutar de mi familia, mi gente y del cariño de mi público. Gracias por preocuparse por mi salud, aquí sigo echándole muchas ganas”, escribió en su momento.
Pero no sólo llegó a atiborrar este coloso, ya que entre sus logros, un 15 de septiembre de 1984, hizo el lleno en la Plaza de Toros México, inmueble que algunas estrellas de ese tiempo no lograron ponerlo a tope, sin embargo, Vicente, con sus canciones ‘del pueblo’, logró reunir a 54 mil almas.