Carlos Loret de Mola habla de sus viajes a las guerras
El periodista mexicano dijo que lo más difícil es dejar a su familia
Carlos Loret de Mola Foto: photoamc
Carlos Loret de Mola celebró con el equipo de “Primero Noticias” 10 años de transmisiones en ‘El Canal de las Estrellas’, de Televisa, con dos mil 610 emisiones que llevan desde 2004.
De acuerdo con TvyNovelas, lo más difícil para el periodista es ir a las guerras y dejar a su familia, conformada por su esposa Berenice Yáber y sus hijos Mikel, Katia e Iñaki.
“De hecho, cuando ellos nacieron creí que ya no iba a regresar. Y sí, la primera vez que volví a una ya con hijos me costó muchísimo trabajo despedirme, fue durísimo, ¡me dieron ganas de llorar! Dije: ‘No voy a poder’, y mira... No sé si cuando sean más conscientes lo van a sufrir conmigo y no sé si lo voy a dejar de hacer”, dijo el informador.
Según lo relata en la publicación, lo más difícil para él, por encima de las guerras en Afganistán y en Libia, han sido los desastres naturales: “Destacaría dos: el tsunami en Indonesia (2004) y el sismo en Haití (2010) ¡nunca había visto tantos cadáveres! En ambos casos fueron 300 mil muertos y era una peste desde que nos bajamos del avión. En Indonesia pasaban junto a nosotros camiones repletos de cadáveres y al llegar a nuestro destino fue caminar entre éstos durante cuatro días. Además, no había dónde dormir ni agua y lo peor: ¡seguía temblando! Eso nos hacía morir de pánico. Entonces dije: ‘Esto no lo volveré a ver jamás’, pero sí lo hice años más tarde del otro lado del mundo. En Haití volví a ver las mismas escenas y a respirar ese olor a muerte que, creí, nunca más volvería a hacerlo”.
Para él, es difícil ir a las guerras y dejar a su familia, dice que en una ocasión le dieron ganas de llorar, por eso trata de no despedirse mucho en las siguientes guerras: “Cuando fui a la guerra de Siria, mi esposa me dijo que mi hijo mayor estaba entre emocionado y preocupado; mi hija Katia, que tiene ya siete años y medio, lo resintió mucho. El niño más pequeño ni cuenta se dio”.
Relató una conversación que tuvo con Mikel, su hijo mayor, durante un paseo en montaña rusa. A Loret de Mola le da mucho miedo subirse a este juego mecánico, pero le dijo a su hijo que lo hacía por él, a lo que el pequeño contestó: “¿Sabes qué? Prefiero nunca más subirme a una montaña rusa a que tú vuelvas a ir a una guerra”. El periodista relata: “¡Me quedé congelado!, porque a él le fascina subirse a estos juegos conmigo. Le dije: ‘Ya hablaremos cuando haya otra’, pero, la neta, ¡su comentario me pegó durísimo!”