Estimados amigos de El Gráfico: Les escribo desde la ciudad de Los Ángeles, California, en donde me encuentro desde hace algún tiempo.
Dejé mi hermoso México bajo el mandato del presidente Enrique Peña Nieto y a mi regreso, este fin de semana, el nuevo mandatario ya será el señor Andrés Manuel López Obrador.
Ustedes saben que yo no hablo de política, pues mi máscara y este personaje no tienen preferencia por ningún presidente o partido, ya que mi compromiso es con México y su gente.
Esto fue algo que aprendí de mi padre, El Santo, quien siempre apoyó a los políticos que requerían de su presencia en eventos públicos para alguna causa importante. No así el hombre que está debajo de la máscara y da vida a El Santo o El Hijo del Santo, pues al igual que mi padre, como ciudadano, puedo opinar y dar mis puntos de vista.
Desde que inicié mi carrera profesional siempre me he mantenido al margen en el tema de la política y también cerca de los mandatarios que me han hecho el honor de invitarme a participar en eventos, como me sucedió con los ex presidentes Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, quien recientemente nos condecoró con el Premio Nacional del Deporte.
También coincidí en alguna ocasión con el licenciado Miguel de la Madrid y con Carlos Salinas de Gortari, siempre expuesto a las críticas de mis detractores cuando aparezco con alguno de ellos en fotografías.
Seguramente, en algún futuro también tendré acercamiento con el ahora presidente López Obrador, pues como les comenté al inicio, este personaje siempre estará al servicio de México.
Sinceramente, y al igual que ustedes, lo único que deseo es tener un país inundado de paz social, de seguridad, de crecimiento económico, de oportunidades para nuestros hijos y para las nuevas generaciones. Deseo ver nuestros mares y nuestras playas limpias, así como nuestras selvas y bosques repletos de fauna y recursos naturales.
Cada seis años tengo un sentimiento de esperanza muy grande y deseo que al próximo mandatario le vaya muy bien para que también le vaya bien al país y a nosotros los mexicanos.
Hay algo que quiero decirles: el triunfo de Andrés Manuel López Obrador fue contundente. Sin duda, la mayoría de los mexicanos así lo quiso y estamos de acuerdo con eso. Bueno, pues yo recomiendo a todos que lo apoyemos para que haga su trabajo de la mejor manera. No empiecen con descalificaciones sin fundamento.
No estoy hablando de que no expresemos nuestra opinión en lo que no estemos de acuerdo. Más bien me refiero a que no le den fuerza a tantas descalificaciones en redes sociales.
Mantengamos una postura positiva y madura, pues me parece que llegó el momento de tomar el riesgo de crecer y cambiar para bien.
Tengamos esperanza, confianza y muy buena actitud; esto a penas empieza. Bienvenid, señor presidente López Obrador. Le encargo a este México lindo y querido y, si puedo ayudar, cuente conmigo como ciudadano y como personaje.
Nos leemos la próxima semana para que hablemos sin máscaras.