Conoce la historia de una familia que murió carbonizada en una vecindad de la colonia Obrera

A pesar de los intentos para rescatarlos, una familia murió carbonizada durante un incendio en una vecindad de la alcaldía Cuauhtémoc. 

Durante la madrugada del 12 de febrero de 1954, bomberos encontraron los cadáveres de dos adultos y tres menores, quienes estaban abrazados por sus padres, sobre un camastro de una vivienda ubicada en la esquina de calles León con Gama de la colonia Obrera. 

Después de la medianoche, una vecina se asomó al patio de la vecindad porque la luz que percibía por la ventana de su habitación la despertó. 

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Cuando observó una de las viviendas cubierta en llamas, pidió a los vecinos que salieran de sus casas para apagar el fuego. 

Minutos después, cuando algunas personas sacaban sus muebles a la calle, personal del Cuerpo de Bomberos sofocó el incendio.

Al lugar también llegaron agentes del Ministerio Público, quienes señalaron que el fuego se produjo por un derrame de una estufa de petróleo, que de inmediato se intensificó porque una parte de la vivienda estaba hecha de madera y cartones. 

De acuerdo con los vecinos, en la casa vivían el señor Antonio Feliciano con su esposa Viana Albarrán y sus hijos Paula, María Socorro y Adelaido, de 10, 8 y dos años. 

Antonio Feliciano trabajaba como comerciante de fruta en la vía pública y su esposa, por las mañanas, vendía “pancita” cerca de la vecindad; además, explicaron que la señora ponía a cocer carne en un bote de “cuatro hojas” durante la noche. 

Los cadáveres fueron trasladados en una ambulancia de la Cruz Verde a un anfiteatro para que les practicaron una necropsia legal; al siguiente día, las autoridades los enterraron en una fosa común. 

Dos semanas después, la tienda de modas “La Florida”, que se ubicaba en la calle Monte de Piedad número 5, se incendió; el fuego consumió mercancía con un valor de 150 mil pesos.

Foto: (Archivo. El Gráfico)